Empresarios pesqueros proyectan una caída del 30% en las exportaciones en 2020

La baja en los precios de las commodities y la falta de demanda tanto a nivel nacional como internacional se convirtieron en las principales preocupaciones de los empresarios del sector pesquero de Mar del Plata, que proyectan una caída del 30% en las exportaciones para 2020 por la pandemia de coronavirus, según referentes de la […]

La baja en los precios de las commodities y la falta de demanda tanto a nivel nacional como internacional se convirtieron en las principales preocupaciones de los empresarios del sector pesquero de Mar del Plata, que proyectan una caída del 30% en las exportaciones para 2020 por la pandemia de coronavirus, según referentes de la actividad.

Directivos de las cámaras que agrupan a las firmas marplatenses, especialmente a Pymes, estimaron que “en un escenario optimista” las exportaciones caerán a niveles similares a los de 2010.

Frente a este panorama existe preocupación también entre representantes del sector gremial, por la incertidumbre respecto de la actividad para los próximos meses y la falta de recursos para procesar en tierra, un problema de larga data en la localidad balnearia, amplificado en este contexto.

El presidente de la Cámara de Armadores de Buques Pesqueros, Sebastián Agliano, aseguró que el puerto marplatense opera desde los primeros días de marzo “en un nivel cercano al 50 por ciento, en comparación con el mismo período del año pasado”.

En diálogo con Télam, explicó que las principales causas de esta situación eran “la baja en los precios de las materias primas a nivel internacional, y que gran parte de la demanda de los productos pesqueros están también en caída”.

Agliano señaló además otros factores que “afectan a la producción” pesquera en la ciudad: “Somos considerados una actividad esencial y a su vez estamos en cuarentena, y trabajamos con todos los protocolos que se fueron diseñando; y aparece una complejidad porque el puerto tiene una triple administración con el Municipio, el Consorcio Portuario, que es provincial; y Nación, con Sanidad de Fronteras”.

“Por todo esto, mantener en funcionamiento el sector no es tan simple como poner un barco en el agua y sacarlo. Hay una vinculación con talleres navales, carga y descarga, camioneros, administrativos de agencia marítimas, que suma un cúmulo de gente que quizás no se contempló que podía estar circulando, y es muy complicado de coordinar”, agregó.

La empresas nucleadas en la Unión de Intereses Pesqueros Argentino (Udipa) y Cámara de Frigoríficos Exportadores de la Pesca (Cafrexport), registraron por su parte durante marzo y la primera quincena de abril “caídas del 52% en las toneladas destinadas al mercado interno, en promedio, y bajas del 43% en las comercializadas al exterior”, respecto del mismo período en 2019.

Mariano González, gerente de ambas instituciones, afirmó que “el impacto negativo de la pandemia en el sector se siente fuerte en los precios de la materia prima y en los volúmenes exportados”.

En esa línea, un relevamiento realizado por la organización Intercámaras de la Industria Pesquera Argentina alertó sobre la “cancelación de pedidos de importación por parte de los mercados del Brasil, Estados Unidos y Europa”, principales focos de la pandemia.

González puntualizó en ese sentido que, desde el inicio de la emergencia global, el impacto se notó en la venta de langostino a China, donde el valor exportado “mermó en un 38%”, mientras que “en España la caída fue del 28% y en Tailandia del 24%”.

“El calamar cayó un 42% en China en el total exportado, España un 8% y Japón un 41%. La merluza hubbsi tiene destinos más regionales, por eso lo peor está por venir, aunque hacia Estados Unidos cayó un 19% en los dos primeros meses”, detalló.

El escenario, según los empresarios, presenta además “una caída del 48% en la cantidad de mareas realizadas por los buques fresqueros, comparando con el primer trimestre 2019”.

Agliano aseguró que esta situación se traduce en menor actividad en tierra: “Todo lo que mueve mayor cantidad de mano de obra, como las plantas de procesamiento de la ciudad, no trabajan prácticamente por falta de demanda. En pesca costera, el 50 % es para mercado interno, pero hoy está muy restringido porque todo lo que es hoteles y restaurantes están cerrados”.

En ese sentido, la secretaria general del Sindicato Obrero de la Industria del Pescado, Cristina Ledesma, definió la situación como “alarmante” y aseguró a Télam que “el poco pescado que llega a las plantas no alcanza para nada”.

Ledesma dijo que la situación del gremio, que nuclea a más de 8.000 trabajadores en tierra “es muy complicada”, porque “desde enero se venían registrando despidos y esto del virus empeora todo el panorama”.

“Está entrando poco pescado para procesar porque la captura se concentra en la exportación, que también cae, y entonces lo poco que llega se distribuye en las plantas pero no alcanza para nada. Hay plantas que trabajan un día por semana”, afirmó Ledesma.

“En el sector venimos de muchos años complicados, incluso con todos los barcos saliendo, así que la verdad no sabemos cómo va a seguir esto, pero cada vez dependemos más de la ayuda oficial”, aseguró.

Carlos Mezzamico, secretario general del Sindicato Único de Portuarios Argentinos, dijo por su parte que el impacto es menor en el personal embarcado y vinculado con la estiba, por la zafra de calamar y el inicio de la de langostino, aunque coincidió en que “es muy incierto el escenario a futuro”.

“Todos coinciden en que el problema es el cierre de los mercados. Los buques en el sector congelador y potero están descargando en buen nivel, pero el gran problema es que aunque por ahora hay pescado, hay poco pedido y caída de los mercados, y los empresarios están desconcertados”, señaló.