necesitan lluvias

Entre Ríos: se sigue complicando la producción de trigo por falta de lluvias

Esta sequía, la peor de la provincia en los últimos 60 años y la gran escases de precipitaciones del último tiempo, complican la producción de la campaña 2022/23, advirtió la Bolsa de Cereales local.

Si no caen lluvias cercanas a los cincuenta milímetros en la segunda semana de octubre, "será difícil alcanzar la performance productiva normal" para la temporada de la fina entrerriana, remarcó la Bolsa de Cereales.

El centro y el sur entrerriano están secos, donde los cultivos de la fina reclama un "perentorio retorno de precipitaciones de mayor volumen", algo que "no se satisface en los pronósticos", indicó la entidad bursátil en un informe.

En septiembre llovió y eso dividió a la provincia en dos: centro y norte tuvo acumulación pluvial “normal en términos estadísticos”, centro y sur, la principal zona triguera de la provincia, no hay ni vientos de lluvia.

A este actual problema se suma que durante el último invierno, se registraron también muy pocas lluvias y para octubre se espera escases pluvial. Las reservas de humedad en el suelo provincial presentan deficiencias que presionan sobre el estado de los cultivos, señaló la Bolsa.

Aunque los lotes están "relativamente bien", actualmente necesitan "un golpe de agua más generoso" para apuntalar los rendimientos.

En ese marco, el organismo propone "replantear potencialmente las prácticas agronómicas tradicionales, sobre todo las fechas", para lograr "salir de la amenaza de sequía".

Entre Ríos viene siendo castigada por la falta de lluvias desde el 2001, donde los registros pluviales de diciembre se posicionaron entre los diez más bajos de los últimos 60 años, y las lluvias de ese mes acumularon menos de 20 milímetros, seis veces por debajo de lo que normalmente debe llover.