"Está perdido por la droga": el crudo testimonio del padre de uno de los menores que asesinó a Kim Gómez

Un crimen que conmociona a La Plata

El asesinato de Kim Gómez ocurrió cuando la madre de la niña fue interceptada por delincuentes en la intersección de 25 y 72. Tras abrir la puerta del vehículo en el que viajaban, la mujer fue arrojada al suelo, mientras que los ladrones se llevaron el auto con la niña aun dentro, atada con el cinturón de seguridad.

El padre del mayor de los detenidos, identificado como Héctor, relató cómo se enteró de lo sucedido y la decisión que tomó al respecto. "Había ido a comprar unas cubiertas a Buenos Aires y cuando volvía, mi hija me llamó y me dijo: 'Papi, Tobías se robó un auto y mató a una nena'. Le dije que lo retenga para entregarlo a la Policía", explicó.

"Yo venía renegando mucho con él"

El hombre sostuvo que desde hacía tiempo su hijo presentaba problemas de conducta y consumo de drogas. "Hace 20 días se había robado un auto y terminó en la comisaría Quinta. Yo no lo quería retirar, quería que lo manden a algún lado, pero me dijeron que no lo podían tener porque es menor y tenía que llevármelo sí o sí", expresó.

Entre lágrimas, describió la difícil relación con el adolescente: "Él anda en la calle, está perdido en la droga. Lo tuve laburando conmigo y me di cuenta de que me robaba cosas, así que lo eché de casa". Asimismo, contó cómo fue el momento en el que decidió entregarlo a la Policía: "Fui a la comisaría Tercera, pero no me tomaron la denuncia porque no era de la jurisdicción. Luego fui a la Octava y había mucha gente, pensé que me iban a pegar. Finalmente, frené a un patrullero y les dije que quería entregarlo".

Entrega y pedido de justicia

En su relato, Héctor recordó que su hijo pedía disculpas y aseguraba que "no había visto a la nena". Además, reveló que él mismo identificó y entregó a la Policía al otro menor involucrado, de 14 años. "Le dije a los policías: 'Vamos, que los llevo a la casa del otro, sé quién es'. Lo saqué de la casa y les dije que era el otro pibe que estaba con él. Son chicos del barrio que están perdidos en la droga", señaló.

Con dolor y bronca, Héctor calificó a su hijo como "una mierda de persona" y dejó en claro su postura: "Así como lo entregué, ya le dije que no me llame, que se pudra adentro de la cárcel y que pague lo que hizo. Me cansé de hablarle, le había dejado una casa, una moto, no tenía necesidad de hacer nada de esto".

Por último, dirigió un mensaje a los padres de Kim Gómez: "Les pido mil disculpas y los acompaño en el sentimiento. Él va a pagar lo que hizo, no va a salir de ahí adentro". También relató que intentó encontrarse con Marcos, el padre de la niña asesinada, para pedirle perdón personalmente, pero no logró dar con él. "Fui al Cementerio a buscarlo, pero ya no estaba. Luego fui a la comisaría para pedir su domicilio, pero no me lo quisieron dar".

Con respecto a los problemas de adicción de su hijo, Héctor indicó que "habrá empezado a consumir hace dos o tres años", dejando el colegio y adoptando una actitud rebelde. "Que no los suelten a ninguno de los dos, que paguen lo que tienen que pagar", concluyó.