SALIÓ TODO MAL

Explosión en una feria de ciencias en Pergamino: una nena resultó gravemente herida mientras presentaba un experimento escolar

Una demostración escolar en el Instituto Comercial Rancagua terminó en tragedia cuando un experimento químico explotó frente al público. Diez alumnos resultaron heridos y una niña fue trasladada en helicóptero al Hospital Garrahan con graves lesiones en el rostro.

La ciudad bonaerense de Pergamino atraviesa momentos de profunda conmoción tras la explosión ocurrida durante una feria de ciencias escolar en el Instituto Comercial Rancagua.

Lo que debía ser una jornada de aprendizaje y exhibición de proyectos terminó con al menos diez estudiantes heridos, uno de ellos de gravedad.

El hecho se produjo el jueves durante una muestra abierta a la comunidad. En uno de los stands, una alumna presentaba una maqueta que simulaba la erupción de un volcán. Frente al público explicó los pasos del experimento y mencionó que mezclaría azufre picado, carbón y una sal especial, ingredientes que —según dijo— formarían “la pólvora que va a explotar”.

Instantes después, cuando una docente dio la indicación de encender la maqueta, el fuego provocó una violenta detonación que desató el pánico entre alumnos, padres y docentes presentes. En los videos grabados por asistentes se escucha a una mujer decir “qué miedo” segundos antes de la explosión. La escena se tornó caótica: gritos, humo, y fragmentos de material volando hacia la primera fila, donde se encontraban varios niños.

La menor más afectada fue atendida de urgencia en el Hospital San José de Pergamino y luego trasladada en un vuelo sanitario al Hospital Garrahan de Buenos Aires. Fuentes médicas confirmaron que sufre lesiones severas en el rostro y podría perder la visión en un ojo. Otros estudiantes permanecen internados por quemaduras y contusiones.

El incidente desató un fuerte debate sobre la responsabilidad institucional y la falta de protocolos de seguridad en actividades escolares que involucran reacciones químicas. “La tragedia pudo haber sido aún peor”, lamentaron testigos, mientras se espera un informe oficial que determine cómo fue posible que se realizaran mezclas explosivas en un ámbito educativo.

La comunidad educativa permanece consternada y se aguarda que la fiscalía inicie una investigación para establecer las responsabilidades del centro educativo y del personal docente presente en el momento del accidente.