Guzmán dijo que hubo un "acercamiento importante" con bonistas de la deuda

El ministro de Economía, Martín Guzmán, afirmó que hubo “un acercamiento importante” con un grupo de bonistas en las renegociaciones en el marco de la reestructuración de USD$ 66.300 millones de deuda emitida bajo legislación extrajera aunque "todavía queda un camino importante por recorrer” para llegar a un acuerdo.

“Hoy se venció uno de los acuerdos de confidencialidad de esta semana. Hay otro que aún está vigente. De este último aún no podemos hablar. Con respecto al que venció hoy, el resultado es que nos hemos acercado pero aún hay un camino importante por recorrer”, manifestó.

En un comunicado publicado en las últimas horas, la cartera económica hizo alusión a las reuniones que mantuvo con inversores a lo largo de esta semana y señaló que es factible una nueva prórroga del plazo para llegar a una acuerdo, fijado para el 2/6.

El gobierno había logrado el último 21 de mayo extender las negociaciones hasta esa fecha y se había establecido la confidencialidad como herramienta para llevar adelante dicha negociación, plazo que venció en el día de hoy.

"Actualmente, el vencimiento de la Invitación está programado para el 2 de junio de 2020. Argentina y sus asesores pretenden continuar con las discusiones con los inversores para promover una reestructuración de deuda que contribuya significativamente a estabilizar la situación económica actual, a mitigar las restricciones a mediano y largo plazo sobre la economía de Argentina creadas por su actual carga de deuda, y a orientar la trayectoria económica del país hacia el crecimiento de largo plazo", señala el comunicado.

En ese sentido, Guzmán aseveró que en en estas negociaciones el Gobierno presentó a los acreedores “unos términos de referencia que buscan acercarnos a un acuerdo que cuide a Argentina”.

El ministro señaló que es el grupo de acreedores denominado Ad Hoc quien hoy "tiene una posición más alejada de las restricciones que enfrenta nuestro país" y luego manifestó: "El grupo de acreedores llamado Ad Hoc se movió en la dirección correcta con respecto a su oferta previa, pero el movimiento fue corto, insuficiente para las necesidades del país”.

Guzmán advirtió que son dos los desafíos que debe superar el gobierno en el áspero camino de las negociaciones: “Uno es el de llegar a un entendimiento con todo el conjunto de acreedores. Y otro es el de reconciliar las posiciones de los distintos acreedores, que son bien diversas, pues todos tienen distintas tenencias de instrumentos, y por lo tanto tienen distintas preferencias y visiones”, señaló.

"Como en toda reestructuración, la coordinación entre acreedores siempre es una cuestión central”, concluyó el ministro.