POLÍTICA

La CGT no descarta un paro general nacional para la próxima semana

El sindicalismo se reunirá el lunes para evaluar medidas ante el atentado contra Cristina.

El Consejo Directivo de la CGT se declaró en estado de alerta y sesión permanente en repudio al ataque perpetrado el jueves contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y "en defensa de la democracia y la paz social", y convocó a su conducción a deliberar otra vez el lunes para decidir la posibilidad de un paro con movilización.

Los integrantes del Consejo Directivo deliberaron varias horas en el histórico edificio de Azopardo al 800 y repudiaron de forma unánime el ataque con arma de fuego cometido por un ciudadano brasileño frente a las puertas del domicilio de la vicepresidenta de la Nación y titular del Senado, y declararon el estado de alerta y sesión permanente.

Los gremios confederados en la CGT, junto con los de la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA) y los de su par Autónoma (CTAA) -que conducen Hugo Yasky y Hugo Godoy, respectivamente- participaron luego en la multitudinaria movilización hacia la Plaza de Mayo para repudiar el ataque e intento de magnicidio contra la Vicepresidenta.

"El consejo directivo dejó las puertas abiertas para convocar a una huelga nacional con movilización para la semana próxima, según la evolución de la situación política y, por lo mismo, deliberará el lunes a partir de las 16", indicaron los voceros a Télam.

En realidad, la CGT debatió la posibilidad de convocar a un inmediato paro general ante los graves hechos ocurridos en el barrio de la Recoleta, frente al domicilio de la Vicepresidenta, pero las opiniones estuvieron divididas y finalmente se optó por la marcha de este viernes hacia la Plaza de Mayo, aunque se ratificó el nuevo debate del lunes próximo.

Los voceros cegetistas confiaron a Télam que un conspicuo y veterano dirigente desaconsejó a sus pares la inmediata declaración de una huelga y fundamentó la posición en que hoy "no le conviene a nadie, porque la gente está cansada, conmovida y temerosa", por lo que prevaleció la postura de retomar las deliberaciones el lunes próximo.

La totalidad de las organizaciones sindicales confederadas expresaron de forma unánime su total repudio al ataque cometido contra la Vicepresidenta, señalaron su solidaridad, respaldaron al Gobierno nacional y se declararon en alerta permanente.

Sin embargo, las fuentes consultadas por esta agencia no descartaron la posibilidad de que el lunes se decida una medida de fuerza nacional según la evolución de la situación política, e incluso adelantaron que la protesta podría realizarse el miércoles 7.

Así lo confirmó también luego del encuentro de consejo directivo el cotitular de la central obrera y dirigente del gremio de sanidad (ATSA) Héctor Daer, quien encabezó una conferencia de prensa, acompañado por sus pares Pablo Moyano y Carlos Acuña.

El encuentro de este viernes del Consejo Directivo fue calificado por los dirigentes como "una reunión extraordinaria" ante "los graves acontecimientos nacionales ocurridos frente al domicilio de Cristina Fernández", y detallaron que la reunión de las 16 del lunes próximo contemplará, además, una variada agenda de temas políticos y sociales.

"La CGT se declara en alerta y sesión permanente y se reunirá otra vez el lunes para analizar lo que ocurra en las próximas horas y días y el accionar de la sociedad", señaló Daer.

En el encuentro de consejo directivo en Azopardo participaron por la CTA Yasky y el adjunto de esa central obrera, el docente Roberto Baradel, quienes ratificaron el paro general de este viernes y participaron en la masiva movilización hacia la Plaza de Mayo.

La CGT sostuvo el jueves por la noche en un comunicado que el atentado sufrido por la Vicepresidenta fue "salvaje", lo calificó como "un intento de magnicidio" y sostuvo que el hecho debe interpelar a la totalidad de los dirigentes políticos que a diario "tensan el clima social hasta niveles realmente irracionales", y añadió que "el odio que emana de la confrontación política exacerba los ánimos y, los violentos, se expresan de manera brutal".

"El hecho cometido contra la Vicepresidenta tiene directa relación con la ola de violencia engendrada hacia algunos líderes populares y alentada desde muchos sectores de la política y los medios. Lo que ocurrió fue triste y vergonzoso para la democracia", afirmó.

Tanto la CGT como la CTA exigieron “celeridad y responsabilidad” a la justicia para investigar en profundidad el ataque contra la vicepresidenta y para que determine al "responsable material y qué existe detrás del hecho" ocurrido anoche en Recoleta.