CAPITAL FEDERAL

La desigualdad en la Ciudad crece a pasos agigantados

Según un estudio, los barrios del sur de Capital Federal registran una pobreza cuatro veces mayor al resto.

Los barrios del sur y del norte de la ciudad de Buenos Aires muestran marcadas diferencias económicas y sociales, que se reflejan en una brecha en los niveles de pobreza, ingreso, desocupación, formalidad laboral, acceso a los servicios y hasta en la cantidad de habitantes por hogar, según los datos informados por la Dirección General de Estadística y Censos (Dgeyc) porteña.

Estas cifras dan cuenta de esa brecha que, si bien es histórica, se ha profundizado por "patrones de mercado que son muy difíciles de alterar", sostuvo a Télam el director de Investigaciones del Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA) de la Universidad Católica Argentina (UCA), Agustín Salvia.

En el mismo sentido, el organismo estadístico porteño advirtió en su informe que "en los hogares de la zona sur se observa el mayor porcentaje de hogares en condición de pobreza multidimensional que en el resto de la ciudad", una situación que se agudiza al considerar que "en los hogares unipersonales se perciben los ingresos más altos" y que "los hogares familiares", que a diferencia del norte son mayoría en el sur, "son más pobres".

Las cifras oficiales dejan en evidencia ese contraste: mientras el ingreso per cápita familiar fue en el segundo trimestre de $ 86.215 en todo el distrito, en los barrios del norte fue un 43,2% más ($ 123.446), pero en los del sur un 42,1% menos ($ 49.877), con una brecha entre los dos extremos del 147,5% o, si se prefiere, un habitante de los barrios del sur necesita trabajar dos veces y media más que uno del norte para adquirir los mismos bienes y servicios.

La diferencia en la medición de pobreza multidimensional es aún mayor: del 17,5% en el promedio del distrito, del 7,4% en los barrios del norte y del 32,1% en los del sur, 4,3 veces más que en el otro extremo de la ciudad.

La pobreza multidimensional tiene en cuenta, además de los ingresos, variables como alimentación y salud, servicios básicos, vivienda, hábitat, accesos educativos, empleo y seguridad social.

Salvia señaló que el contraste norte-sur en la ciudad "tiene una larga historia" cuyos orígenes se remontan a la década del '70 del siglo XIX, cuando a raíz de la epidemia de fiebre amarilla las familias de mayores recursos, que habitaban en los barrios de San Telmo, Monserrat y San Nicolás, resolvieron instalarse en Barrio Norte, Recoleta, Retiro y Belgrano.

"Se han ido concentrando en determinadas zonas de la ciudad poblaciones de clase media en ascenso, de la vieja aristocracia que devinieron en clases medias profesionales, vinculadas fuertemente a la administración pública", indicó el académico.

En ese desplazamiento, agregó que "dejaron las áreas del sur de la ciudad para la ocupación de los migrantes a la Capital, donde se desarrolló la mayor concentración de trabajadores asalariados, cuentapropistas, desocupados, produciendo efectos de una marcada desigualdad social", en tanto en los barrios del centro quedó establecida una "franja intermedia, de sectores que no pertenecían a la vieja aristocracia, los profesionales, cuentapropistas, obreros, empleados y asalariados con cierta calificación".