La economía cayó 1,7% en abril y sigue en su nivel más bajo desde la pandemia

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) confirmó este viernes que la economía argentina volvió a caer en abril pasado y sumó así su sexta caída interanual consecutiva.

La actividad económica fue un 1,7% menor que el mismo mes del año pasado pero también mostró un deterioro en la medición desestacionalizada respecto de marzo pasado. De este modo, se ubicó en su nivel más bajo desde mediados de 2021, cuando todavía se sentían las consecuencias económicas del impacto de la pandemia de Covid-19.

Según datos oficiales publicados este viernes, la industria manufacturera fue el sector que más incidió en la variación genera, al experimentar un desplome del 15,7% respecto de abril del año pasado. Detrás le siguieron el comercio y la construcción, con derrumbes del 13,1% y 24,8%, respectivamente.

Solo tres sectores mejoraron en términos anuales y contribuyeron a atenuar la caída del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) del INDEC. Estos fueron el agro, la minería y la energía, y la pesca.

El incremento en la producción agrícola y ganadera (+70,3%) explicó la mayor parte de la desaceleración de la contracción anual del EMAE. Esto respondió fundamentalmente a la baja base comparación, ya que a esta altura de 2023 el campo padecía los graves efectos de la sequía.

Sin el agro la actividad económica hubiese exhibido una merma anual del 6,6%.

Asimismo, la economía volvió a tocar un nuevo piso en términos mensuales, en contraposición a la leve mejora que esperaban la mayoría de los analistas. Concretamente, los números indicaron un deterioro del 0,1% respecto de marzo.

"En abril la actividad estuvo tocando su piso. El dato apenas negativo, y la corrección para moderar la baja de marzo nos marcan un amesetamiento en el nivel de actividad, propio de una economía que busca su piso", sostuvo Eugenio Marí, Economista Jefe de la Fundación Libertad y Progreso, aunque remarcó que estamos "lejos de una recuperación generalizada".

"La aprobación de la ley Bases y el paquete fiscal en el Congreso abren la puerta a que el Gobierno pueda acelerar la unificación cambiaria y el desarme de los controles de cambios, que en este momento son el principal freno al ingreso de capitales y de inversiones. A partir de estas reformas se podrá apostar a que la economía entre en una recuperación más clara en el segundo semestre", acotó.