Atentado contra CFK

La querella de Cristina exigió “medidas de prueba urgentes” en relación a Milman

El diputado Gerardo Milman comenzó a ser investigado a raíz de que un testigo dijo haberlo escuchado saber sobre el atento previo al intento.

La querella de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió “medidas de prueba urgentes” en la causa que investiga el intento de homicidio cometido en su contra el 1° de septiembre pasado, ante una “serie de acontecimientos que refuerzan, indudablemente, la línea de investigación vinculada con Gerardo Milman”.

El legislador, que también fue denunciado por “enriquecimiento ilícito”, es investigado a raíz de la declaración de un testigo que dijo haberlo escuchado hablar de lo que iba a ocurrir el 1° de septiembre, en la antesala del atentado que cometió Fernando Sabag Montiel en la puerta del domicilio de la exvicepresidenta en Recoleta.

Los abogados José Manuel Ubeira y Marcos Aldazábal, apoderados de la vicepresidenta, presentaron un escrito ante la jueza que instruye la causa, María Eugenia Capuchetti, en relación a una denuncia por “presunto enriquecimiento ilícito” presentada contra el diputado del PRO, según la información que trascendió. En esa denuncia se describe un entramado de relaciones que vincularían a una socia de una secretaria de Milman con Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte, los detenidos por el intento de magnicidio contra la ex primera mandataria

El legislador quedó en el ojo de la tormenta. “Cuando la maten, yo estoy camino a la costa” habría dicho el último 30 de agosto en un local gastronómico, según declaró el testigo, asesor de un diputado del Frente de Todos (FdT).

A raíz de esto, presentó un escrito en la causa en la que negó ser el autor de esa frase que se le atribuyó, por lo que realizó una denuncia contra el testigo.

Milman es investigado en la causa a raíz de la declaración de un testigo que dijo haberlo escuchado hablar de lo que iba a ocurrir el 1° de septiembre frente a dos empleadas suyas, en una mesa de la confitería Casablanca, ubicada en las inmediaciones al Congreso Nacional, antes del atentado que cometió Fernando Sabag Montiel.

Un contexto favorable para la denuncia

La querella de Cristina Fernández de Kirchner pidió ahora medidas de prueba porque se conoció una denuncia contra Milman por presunto “enriquecimiento ilícito y lavado de dinero” que también involucraría a una de las secretarias que estuvo ese día en la confitería y declaró como testigo en Comodoro Py 2002, con el claro objetivo de negar los hechos. En el escrito presentado por los letrados que patrocinan a CFK, se puntualizó: “En concreto, se presentó una denuncia por un presunto enriquecimiento ilícito y lavado de dinero que involucraría tanto a Gerardo Milman como a quien fue testigo en este proceso, Carolina Gómez Mónaco. También fue denunciada su hermana, Daniela Gómez Mónaco”.

En ese contexto, la querella habló de un “entramado” que “no parece ser una coincidencia”, y señalaron que el legislador del macrismo “designó a Carolina Gómez Mónaco, quien no tenía ningún antecedente en la materia, como titular de la Escuela de Inteligencia sobre el Delito, parte de la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal”. La hermana de la aludida, Daniela, “fue designada como jefa de administración” del organismo y “era entonces, quien manejaba los fondos reservados de la dependencia”. “Increíblemente, pocos días después de su designación”, Carolina López Mónaco constituyó una sociedad con un hombre llamado Fernando Daga, “Luxa Estética”. Por otro lado, consideraron “preocupante” que se “muestra el presunto carácter delictivo de una testigo que declaró de un modo ostensiblemente falso” y que “hasta se contradijo con su compañera de trabajo, Ivana Bohdziewicz”, quien también declaró en la causa.

“Aparentemente este emprendimiento habría sido financiado con fondos reservados y, además, funcionaría como un mecanismo de lavado de dinero”, advirtieron los letrados. En el mismo lugar donde funcionaba “Luxa Estética”, se extendió la querella, tiene sede “Top Studio Obelisco”, una suerte de academia de danzas y fitness, manejada por Carolina Gómez Mónaco y María Mroue. “Mroue no es, ni más ni menos, que la periodista a cargo del programa en el que hicieron sus primeras apariciones Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte”, los dos acusados y procesados con prisión preventiva por el intento de magnicidio. Los querellantes, además, aseguraron que todo lo reseñado “da a lo relatado por el testigo que consignó lo ocurrido en la confitería Casablanca una entidad probatoria enormemente superior” y su testimonio “adquiere otra fuerza”. “La persona a la que le hablaba Milman (Gómez Mónaco) tenía un vínculo con alguien con contacto directo con Sabag Montiel y Uliarte, quien se encargó de llevarlos a la televisión”, añadieron los abogados Ubeira y Aldazábal. Finalmente, los letrados advirtieron que “hay fuertes indicios de que Mroue sería el vínculo entre Sabag Montiel y Uliarte, por un lado y Milman y Gómez Mónaco, por el otro”.

La palabra del abogado Yamil Castro Bianchi

En declaraciones radiales, Yamil Castro Bianchi, el abogado que denunció a Milman por malversación de fondos públicos, propuso que “la Justicia investigue el dinero que envió Milman a su secretaria y la hermana para abrir el centro de estética que no acredita con el patrimonio previo que tenía”.

“En cuanto a la facturación, estaban inscriptos por una ganancia de $50 millones. No hay correlación entre ingresos por funcionarios públicos y los ingresos declarados. En estos lugares, uno podría llegar a lavar dinero, porque nadie controla si entró una o dos personas”, destacó el letrado.

Finalmente, Castro Bianchi destacó cuál podría ser la pena para el legislador macrista: “La pena que conlleva este tipo de delitos, además de ser altas, incluye la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos”.