La Villa San Martín y la región de Abasto separadas por tierra

En la tarde de ayer, sorprendentemente, un camión de la Municipalidad de La Plata bloqueó una calle de Abasto con montículos de tierra para impedir la circulación.
En los primeros minutos trascendió que el corte respondía al pedido de algunos vecinos que denunciaron que vehículos ingresaban a la casa de un infectado con coronavirus que se dedicaba a la producción y venta de verduras y hortalizas.

Sin embargo, el delegado comunal, Gabriel Barletta, habló con diario Hoy, desminitó los rumores y explicó: “La calle se cortó para evitar que se evada el control sanitario dispuesto en 520 y 214. Hay personas que venían de Buenos Aires por Ruta 2 y tomaban la 515 para no ser interceptados. Queremos que el que circula esté controlado”.

Los locales están alarmados por la situación que se vive en el barrio. Tras la confirmación de la infección del productor agrícola de origen boliviano, ayer, la empresa abastense Frigolar comunicó que se aisló preventivamente a un empleado, debido a que su esposa dio Covid-19 positivo, y que se evaluará la salud de otros dos trabajadores que estuvieron en contacto con el marido de la infectada.

Otros vecinos de Abasto denuncian que la situación en la Villa San Martín es insostenible. Según advierten, los niños juegan al fútbol y los mayores se reúnen a tomar alcohol en la vereda. Incluso, hablan de fiestas entre la comunidad boliviana, de las que habría participado el infectado que se encuentra internado con pronóstico reservado en el Hospital de Melchor Romero.

“No se pudo corroborar lo del evento, pero estamos en diálogo con la comunidad de Bolivia”, explicó Barletta.
La realidad del barrio alarma, también, a quienes deben velar por la salud de los habitantes. En este sentido, ayer los responsables del Centro de Salud N° 10 emitieron un comunicado solidarizándose con las familias de Villa San Martín y precisaron: “Es momento de ayudarnos entre todos, cuidarnos y no estigmatizar a nadie”. Además, adelantaron que no habrá vacunación.

“Entiendo la preocupación, pero hay que calmarse, porque estamos trabajando en el tema. Hay que quedarse y solo salir para lo indispensable”, concluyó Barletta.