Macri dijo que los alemanes son una “raza superior” y tuvo que pedir disculpas

Allá por 2013, el poderoso asesor comunicacional Jaime Durán Barba, a quien Mauricio Macri le debe gran parte del poder que logró amasar y que lo llevó a la presidencia, dijo, sin ponerse colorado, una frase que escandalizó a propios y ajenos: “Hitler era un tipo espectacular”.

Nueve años después, el propio Macri se despachó con una frase salida del discurso del propio Adolf Hitler, fundador y líder del Partido Nazi y responsable por la muerte de millones de personas en Europa en nombre de la superioridad de la “raza aria” a la que, según afirmaba, pertenecían los alemanes. Hablando, justamente, de Alemania, dijo el exmandatario argentino que es una “raza superior”.

Tanto Durán Barba como Macri tuvieron excusas para esos exabruptos. El ecuatoriano explicó que en su país “la palabra espectacular no tiene una connotación positiva”. Macri señaló que estaba hablando de fútbol. Sin embargo, llama la atención que hubiera elegido esa frase solo para referirse a Alemania, cuando estaba hablando de varios países.

En efecto, consultado sobre las posibilidades de la Argentina de ganar el Mundial de Fútbol, Macri respondió: “Entre los cinco candidatos, hoy la pongo a la Argentina. Obviamente está Brasil, Portugal (muy buenos jugadores), Francia tiene muy buenos jugadores (último campeón), y a Alemania nunca se la puede descartar porque, raza superior, siempre juegan hasta el final”.

La frase generó repudios desde diversos sectores, como la comunidad judía en la Argentina (el nazismo se encarnizó especial y centralmente con los judíos) y la titular del Instituto Nacional contra la Discriminación (Inadi), Victoria Donda.

Macri tuvo que salir a pedir disculpas a través de su cuenta en la red social Twitter, donde dijo que se había tratado de “una frase desacertada”. También allí recibió rechazos. Por ejemplo, el economista Sergio Chouza lo cruzó: “Ni que hablaras solo de deportes resiste análisis la barbaridad que dijiste. No hay razas inferiores ni superiores.”

El exabrupto del fundador del PRO se inscribe en una corriente de discursos de odio que surgen cada vez con mayor frecuencia, y que suelen venir de ese partido. Fueron figuras del PRO las que salieron a negar que las Malvinas fueran argentinas, a defender al policía homicida Luis Chocobar (Macri lo recibió en la Casa Rosada), a pedirle perdón a España por la independencia de nuestro país (fue el propio Macri). Fue la presidenta del partido la que se negó a repudiar el intento de asesinato de la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández. Fue un diputado del PRO el que propuso la pena de muerte para la mandataria.

¿Fue un error la frase de Macri, o se trata de una provocación más? Si se trató de un giro involuntario, es inquietante, porque revela que la asociación entre la nación alemana y la “raza superior”, que sirvió como argumento para exterminar a millones de personas, está fijada en la mente de un expresidente argentino. En tiempos en que la Argentina necesita más diálogo y menos confrontación, estos “desaciertos” no ayudan.