Protesta en Once por la joven venezolana que fue abusada

Luego de la noticia que sacude a Once, por la violación de una joven venezolana de 18 años en una local de ropa –Garzón Uniformes- se congregaron cientos de personas para pedir justicia, en calle Paso al 600.

Habló la madre de la víctima: “El 11 de enero, mi esposo sufrió un ACV que nos obligó a trasladarnos de Morón hasta acá, la necesidad económica nos apremia con lo que era necesario encontrar ingresos, mi hija como cualquier persona honrada buscó un trabajo, cerca de la clínica donde pasamos día y noche con su papá”, comenzó relatando, aguantando el llanto.

“El día que fue a la entrevista tomamos todos los cuidados, como siempre me mandó la ubicación, la foto del local y en ese momento vivimos una situación extraña, la vivió ella, pero la necesidad la llevó a aceptar el trabajo”, detalló.

“Trabajó normalmente por unas horas, hasta que un momento todo cambió, mi niña sintió temor porque le adormecían sus manos, pronto su jefe bajó la persiana, ella atinó a pedir ayuda y yo traté de ayudarla, de cuidarla, de salvarla. Marqué al 911, me atendieron inmediatamente, la Policía de la Ciudad fue eficaz, tuve su apoyo desde el primer momento, estuvieron pendientes del pedido que les hice”, agregó la madre.

“En ese momento, ellos encuentran a mi hija sin poderse defenderse de este agresor, mi niña estaba dopada, estaba drogada, indefensa, mi hija no tenía fuerza, ni conciencia, no podía moverse, no podía valerse por sí misma, por eso yo vine a gritar por ella: justicia”, sostuvo.

“Pudimos salvar su vida, pero no su integridad, llamamos a los jueces, fiscales, autoridades de la Nación, que escuchen este grito de justicia que hace una madre desesperada porque el violador está libre. No queremos más violadores libres, tengan o no tengan antecedentes”, concluyó la madre.