CABA
Realizan una pionera intervención quirúrgica en el Hospital Italiano
Especialistas reconstruyeron la mano derecha de un joven colocándole tres dedos de uno de sus pies.
Especialistas del hospital Italiano de CABA reconstruyeron la mano de un joven devolviéndole la funcionalidad a esa parte del cuerpo sin afectar el desempeño de las extremidades inferiores.
Se trata de una cirugía inédita en la Argentina, donde si bien se habían realizado procedimientos similares nunca antes habían tenido estas características.
Los especialistas reconstruyeron, con un implante de tres dedos de sus pies, la mano de un joven de 24 años que había tenido un accidente. Este tipo de cirugías, a diferencia de las reconstrucciones con impresión 3D, preserva la sensibilidad y funcionalidad de la mano.
"El trasplante de dedos de otra persona (donante cadavérico) implicaría comenzar con una terapia de inmunosupresión para que no se produzca un rechazo del tejido que conlleva como efecto secundario la posible disminución de las defensas del organismo. En el trasplante de dedos estos riesgos pueden evitarse, realizando la reconstrucción mediante los propios tejidos del paciente, en este caso a través de los dedos de los pies", explicó Jorge Boretto, jefe de Cirugía de Mano y Miembro Superior del Hospital Italiano de Buenos Aires, donde se llevó adelante el procedimiento.
Y explicó que "el trasplante de mano completa (no de dedos) con donante cadavérico se hace en otras partes del mundo, pero sólo en los casos de trasplante bilateral, cuando hay una amputación de las dos manos".
En este contexto, los cirujanos del Italiano recibieron a Exequiel, un joven de 24 años que perdió cuatro dedos y parte de otro en un accidente con una picadora de carne.
Debido a la complejidad del caso, el equipo de salud se concentró en modificar las técnicas ya existentes y llevaron adelante la cirugía que se convirtió en la primera de este tipo en el país, tanto por la cantidad de dedos trasplantados como por la elección justamente de los dedos del pie.
La reparación quirúrgica constó de dos etapas: en una primera instancia, los médicos transfirieron el segundo dedo del pie izquierdo a la posición del dedo mayor de la mano derecha. En la segunda etapa, una semana después, el equipo realizó el trasplante del segundo dedo del pie derecho y una transferencia parcial del hallux (dedo gordo o primer dedo del pie).
"De esta manera, la reconstrucción permitió lograr el movimiento de pinza, formando un trípode entre el pulgar y los otros dos dedos trasplantados", remarcaron.
A nivel regional, estas transferencias de dedos de pies a manos se realizan sólo en la Argentina, y en contados centros de Chile y de Brasil.