Chubuy, Río Negro y Neuquén

Se aislaron 25 personas por hantavirus y se busca el origen

Tras la muerte de una docente en Bariloche, se están evaluando las causas del contagio con una investigación entre sus familiares y amigos. Se descarta que haya sido en la zona urbana. La zona andina de Neuquén, Río Negro y Chubut se considera endémica de la enfermedad.

Tras la muerte por hantavirus de Ana Natalia Ayala, una docente de 45 años que permanecía internada en el Sanatorio San Carlos de la ciudad de Bariloche, unas 25 personas definidas como contacto estrecho se encuentran aisladas. El doctor Víctor Parodi, desde el hospital zonal, dijo que las causas del contagio aún se desconocen y se están investigando con familiares y amigos. Se descarta que haya sido en la zona urbana.

Ayala era docente del Jardín de Infantes “Hormiguitas” en el barrio El Frutillar y también formaba parte de la junta vecinal del barrio Frutillar, de la ciudad cordillerana de Río Negro. La docente, si bien no se internó en el hospital, llegó con sintomatología respiratoria de carácter grave. Autoridades sanitarias locales intentaban determinar la forma en la que la maestra había contraído la enfermedad, ya que según sus parientes no había estado juntando leña ni trabajando en galpones, tareas que acarrean peligro de contagio.

Por el deceso de la docente, el Consejo Escolar local, directivos y docentes expresaron su dolor, al igual que sus vecinos. “Siempre es doloroso cuando una vecina joven nos deja”, dijo Gustavo Gennuso, el intendente de Bariloche, y agregó: “El hanta siempre trae miedo y susto, son enfermedades de alta mortalidad, hay un montón de prevenciones y no es la primera vez que pasa. Al dolor de la pérdida de una vecina joven, un dolor importante, sobre todo para el barrio y el jardín, tratemos de sacar el miedo, son cuestiones que hay que tomarlas con respeto pero sin atemorizarse”.

La zona andina de Neuquén, Río Negro y Chubut se considera endémica de la enfermedad, ya que viven los ratones colilargos, que la transmiten. El último brote importante se había dado en la zonas de Epuyén, entre 2018 y 2019, con un saldo de 11 fallecimientos. Según el Ministerio de Salud de la Nación, la enfermedad por hantavirus es una zoonosis emergente producida por virus ARN pertenecientes a la familia Bunyaviridae. Los virus producen en los seres humanos dos formas clínicas graves: la fiebre hemorrágica con síndrome renal en Asia y Europa, y el síndrome cardiopulmonar por hantavirus en América.

Los hantavirus se transmiten fundamentalmente por inhalación de aerosoles cargados de partículas virales provenientes de las heces, orina y saliva de roedores infectados. La transmisión al humano generalmente ocurre al introducirse en el hábitat de los roedores en zonas suburbanas y ambientes rurales, principalmente en los peridomicilios y durante el desarrollo de actividades laborales, recreativas, o en lugares cerrados como galpones o depósitos infestados por roedores.