Tras el tiroteo en YPF, amenazaron de muerte al hijo de Juan Pablo “Pata” Medina

Los trabajadores de YPF, pertenecientes a la empresa AESA, denunciaron violencia, con tiros y agresiones por parte de un grupo “de apriete”, tras haber parado las actividades en pos de reclamar por mejoras en las condiciones laborales. El grupo amenazado trabaja en el sector de reparación dentro de YPF,  y a su vez están afiliados […]

Los trabajadores de YPF, pertenecientes a la empresa AESA, denunciaron violencia, con tiros y agresiones por parte de un grupo “de apriete”, tras haber parado las actividades en pos de reclamar por mejoras en las condiciones laborales.

El grupo amenazado trabaja en el sector de reparación dentro de YPF,  y a su vez están afiliados a la UOCRA.  A raíz de las malas condiciones de trabajo, los empleados decidieron cesar las actividades, y fue ahí cuando hubo una intervención de un grupo de personas (supuestos barras) que amenazaron a los trabajadores con armas de fuego y tiros al aire para que volvieran a sus puestos de trabajo.

En ese sentido, una mujer afiliada a la UOCRA que presenció el hecho, le contó a la RED 92 que “los compañeros de AESA lo único que hicieron fue parar las actividades para reclamar por las condiciones laborales y por el dinero que se les debe. Desde adentro del edificio vino la intervención con los secuaces que tienen ellos, y fue ahí  donde los compañeros se plantaron y reclamaron  tener un delegado elegido por los propios compañeros, y no por la intervención, porque no se siente representados por ellos.”

Asimismo, indicó que “hubo amenazas con armas de fuego, y había 6 o 7 personas que tirotearon a unos compañeros que pasaban por la puerta”.

Vale agregar, que este conflicto también derivó en una amenaza de muerte a Agustín, el hijo del Pata Medina, quien es empleado de la construcción, y obviamente afiliado a la UOCRA.

En ese sentido, dialogó con la RED 92 y manifestó que “todo comenzó en la jornada de ayer, cuando decidí viajar a capital para tener una reunión en la central obrera con Gerardo Martínez, con el fin de pedir una solución laboral, ya que desde que mi papá está en prisión estoy desempleado. Cuando llegué a mi casa, recibí una amenaza por teléfono de parte de una persona que oficia de barra, quien amenazó de muerte a mi persona y mi familia, por haber ido a la central obrera, y acusándome de ser el ideólogo de la protesta que realizaron los compañeros”.

“Por ese motivo, fui a la Fiscalía tres a plasmar la denuncia por las amenazas de muerte a mi familia. Quiero que se haga público, y también que todos sepan que estas personas de la intervención, se dedican a recaudar y apretar a los empleados, cerró”.