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Tucumán: se detectó por primera vez en el año el serotipo 3 del dengue
En Argentina ya se reportaron más de 71.000 casos de dengue y 53 muertes. La mayoría de los pacientes tuvieron los serotipos 1 y 2. Qué gravedad pueden tener quienes se contagien con el DEN-3
En la Argentina, se está desarrollando la peor epidemia de dengue de los últimos 25 años. Desde el verano pasado hasta ahora 71.717 personas han recibido el diagnóstico de la infección transmitida por mosquitos, y se produjeron 53 muertes, según los últimos datos oficiales del Ministerio de Salud de la Nación.
Durante la última semana reportada, en Tucumán, que es la provincia con mayor incidencia acumulada de casos, se detectó la co-circulación de un serotipo del virus del dengue que no estaba registrado en las otras jurisdicciones. Se trata del serotipo 3 (técnicamente llamado DENV-3).
La epidemia con circulación autóctona del virus de dengue afecta a 16 de las 24 jurisdicciones de la Argentina. En las personas diagnosticadas con la infección se venía detectando los serotipo 1 y 2.
Tucumán ha registrado predominio de serotipo 2 desde la detección de los primeros casos a fines de enero pasado. Sin embargo, “la semana pasado hemos detectado 6 casos de personas con dengue con el serotipo 3″, contó Romina Cuezzo, jefa de epidemiología del Ministerio de Salud Pública de Tucumán.
Uno de los 6 casos con el serotipo 3 de dengue fue detectado en La Rioja y otro en Salta. Ambos tenían el antecedente de viaje a Tucumán.
En esa provincia, ya se han reportado 20.575 casos y 9 muertes hasta el último boletín. El brote empezó en el Departamento de Lules, luego siguió en la Capital y sus alrededores. Desde la última semana de marzo, la curva de casos de dengue empezó a desacelerarse. Esto también está ocurriendo en otras jurisdicciones.
De acuerdo con Cuezzo, el serotipo 3 se detectó a través de las estrategias de vigilancia epidemiológica. Es un serotipo que no estaba circulando en el país. Hasta ahora los pacientes con ese serotipo no han requerido internación y tienen recuperación favorable.
“Como se observa que la curva de casos de la provincia está en descenso, se infiere que la presencia del serotipo 3 no estaría contribuyendo a que haya un aumento. Igualmente seguimos haciendo vigilancia para ir monitoreando la situación”, señaló. Esto se debe a que las autoridades sanitarias tienen en cuenta lo que se sabe sobre ese serotipo. “Hay estudios observacionales que informan que los serotipos 2 y 3 pueden estar asociados a formas más severas, comparados con los otros serotipos”, comentó Cuezzo.
Con respecto a por qué la provincia ha tenido una alta incidencia acumulada de casos y 9 muertes, la funcionaria explicó que se debe a diferentes factores. Circuló el serotipo 2 que suele ser más agresivo. “Antes de este brote, el serotipo 2 no había circulado en Tucumán. Por lo cual había muchas personas susceptibles. También hubo cuestiones climáticas que contribuyeron a las poblaciones de mosquitos y a la circulación del virus en zonas urbanizadas”, afirmó Cuezzo.
“Para la prevención y el control del dengue, es importante el compromiso de todos. Desde la política pública de salud hasta lo que hace cada persona de manera individual para eliminar los criaderos de mosquitos y larvas. Es un mensaje que se debe sostener para el futuro y todo el año”, afirmó.
“Los casos de dengue están descendiendo en Tucumán, y no creo que haya un rebrote por la detección del serotipo 3. Esto se debe a que la mayoría de las personas que tuvieron el serotipo 2 en Tucumán van a tener una protección refractaria por cuatro a 6 meses contra todos los serotipos, incluyendo el 3. Después de ese período solo tienen protección contra el 2″, explicó, el médico Tomás Orduna, ex jefe del Servicio de Medicina Tropical y Medicina del Viajero en Hospital de Infecciosas F. J. Muñiz y miembro del Comité Científico de la Fundación Mundo Sano.
En Argentina han circulado los 4 serotipos de dengue en diferentes años y magnitudes. El DENV 1 ha sido responsable del mayor número de casos en las epidemias de 2009, 2016 y 2020. Ha estado circulando en 18 de los 25 años que han pasado desde la reemergencia de la enfermedad en el país. Es decir, que la mayor parte de la población del país expuesta lo fue a DENV-1, según el Ministerio de Salud de la Nación.
En tanto, el serotipo DENV-2 ha sido detectado en diversas provincias y en 13 de los 25 años pero con una incidencia y un alcance territorial mucho menor al del DENV-1.
El año pasado hubo un cambio reciente en el serotipo dominante. El DENV-2 genotipo asiático/americano fue la variante viral identificada en el brote acotado fundamentalmente a la provincia de Salta con algo más de 650 casos. Mientras tanto, se detectó también DENV-1 en la región Centro (Buenos Aires y Santa Fe), la circulación fue muy baja, con algo más de 200 casos.
En 2023 el dengue 2 es el serotipo predominante, pero con una dispersión mayor. Además, se ha podido evidenciar el ingreso de un nuevo genotipo del dengue 2: el cosmopolita.
De acuerdo con la cartera de Salud nacional, el pico de la epidemia de dengue ya habría ocurrido. En un comunicado, se informó el domingo último: “Cabe destacar que al observarse la curva de casos se registra un aumento progresivo sostenido” entre la última semana de enero y la última de marzo.
Luego, “se comprueba un decrecimiento”: fue en la primera quincena de abril se produjo un número menor de casos. Los casos bajaron 31% en la primera semana de abril y un 23% en la segunda en relación al pico que tuvo lugar en la última semana de marzo.
El dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti. Cuando este insecto se alimenta con sangre de una persona infectada por el virus dengue, lo adquiere. Luego de 8 a 12 días, el mosquito es capaz de transmitirlo a una persona sana a través de su picadura.
Vale remarcar que el dengue no se transmite de persona a persona, ni a través de objetos o de la leche materna. El mosquito Aedes aegypti se reproduce a través de huevos que deposita en recipientes y superficies que acumulan agua. No lo hace en charcos, lagunas pantanos, zanjas, ríos o arroyos, por eso, es importante eliminar los posibles criaderos.
Por eso, se recomienda eliminar todos los objetos en desuso que puedan acumular agua, controlar los platos que se encuentran debajo de las macetas y cambiar diariamente el agua de los bebederos de las mascotas. Son algunos de los cuidados que se pueden realizar para evitar la presencia de mosquitos y larvas.
A su vez, se recomienda usar repelente cada vez que se esté al aire libre, instalar mosquiteros en puertas y ventanas y colocar espirales o tabletas insecticidas.