Un nuevo fenómeno mundial: estigmatización por violar la “cuarentena” del Covid-19
Con las diferentes órdenes de cuarentena, aislamiento y distanciamiento social ha surgido un nuevo fenómeno que podría llamarse la “estigmatización por violar la cuarentena”. Las fotos de parques, supermercados y playas repletos de gente en diferentes partes del mundo causaron indignación, con funcionaros públicos tildando a las personas que ignoraban las guías de distanciamiento social […]
Con las diferentes órdenes de cuarentena, aislamiento y distanciamiento social ha surgido un nuevo fenómeno que podría llamarse la “estigmatización por violar la cuarentena”.
Las fotos de parques, supermercados y playas repletos de gente en diferentes partes del mundo causaron indignación, con funcionaros públicos tildando a las personas que ignoraban las guías de distanciamiento social de egoístas, arrogantes o autodestructivas.
En las redes sociales, algunos se han vuelto más críticos -la etiqueta #COVIDIOTS (COVIDIOTAS) se hizo tendencia. Otros han criticado a las personas que han visto en reuniones públicas o escrito mensajes que “merecen contagiarse con el virus“.
En Argentina, una mujer registró con su móvil cómo efectivos de la policía rodeaban a una pareja que acababa de llegar al país y que no estaba observando la orden de aislamiento. “¡No los toquen!”, advertía la mujer a la policía, para luego insultar a la pareja. El video se volvió viral.
Por otra parte, los residentes del balneario Pinamar, en la costa Atlántica de Argentina, se enardecieron con los turistas que llegaban a la playa. “Si no sos de Pinamar, ¡Tomátela!”, fue el mensaje en redes.
Algunos psicólogos sociales explican que la estigmatización juega un papel significativo como estrategia colectiva para hacer cumplir las normas sociales, especialmente en una época cuando esas normas están cambiando rápidamente por el coronavirus.
Hace unos días, el intendente del barrio 3 de Febrero de Buenos Aires, Diego Valenzuela, asumió la responsabilidad de salir en su auto y dar instrucciones por altoparlante a las personas que no observaban las normas de aislamiento y distanciamiento.
“Les pido, no podemos permanecer en el espacio público”, dijo Valenzuela a una pareja sentada en una banca y “mantengan la distancia de dos metros”, a un grupo de personas congregándose en torno a un cajero automático, suplicando a todos a cooperar.
Utilidad de la estigmatización
La profesora Jacquet, que escribió un libro sobre la utilidad de la estigmatización para fomentar la cooperación, cree que esa táctica ha sido usada efectivamente para disuadir a la gente de acaparar suministros o desobedecer las reglas de distanciamiento social.
Ella cree que la estigmatización puede inclusive ser efectiva contra instituciones, por ejemplo, si un gobierno no está haciendo cumplir las normas de distanciamiento social o está rezagado en la provisión de pruebas de coronavirus y en la protección de los trabajadores de la salud.
“Espero que la estigmatización reluzca como una herramienta que puede ser utilizada para el bien social”.
Con respeto
Pero Lizzie Post argumenta que el mal comportamiento puede ser señalado de manera respetuosa. Por ejemplo, en lugar de llamar a los que se congregan en lugares con multitudes “locos” o “estúpidos”, es mejor abordar las preocupaciones de una manera civilizada que invite a la conversación y se concentre en soluciones.
“Sabemos que el tono importa porque la gente lo siente. Si los insultas y criticas su sanidad mental, es un comportamiento muy agresivo”.
Mientras tanto, Daniel Sznycer, un psicólogo social de la Universidad de Montreal (Canadá), afirma que la estigmatización puede disuadir ciertos comportamientos pero advierte que hay límites.
La estigmatización trata esencialmente sobre el “daño reputacional” y las normas sociales, expresa, lo que quiere decir que algunos individuos podrían sentirse avergonzados de un comportamiento particular pero continúan haciéndolo en secreto.
El salir al aire libre es un acto “inherentemente público”, así que la gente que es señalada es más propensa a cumplir las reglas de distanciamiento social, sostiene.