Relato salvaje

Salvaje entradera en Abasto: maniataron a una familia, balearon a un perro y les robaron todo

Actuaron al menos cuatro delincuentes, todos armados, que se apoderaron de dinero y objetos de valor. Escaparon en la camioneta de las víctimas. Por el momento, no hay detenidos

Una verdadera pesadilla le tocó vivir a una familia de la localidad de Abasto, que quedó a merced de cuatro delincuentes armados. Estos ingresaron a su casa, los golpearon, los maniataron y les robaron todo lo que tenían.

Según indicaron fuentes consultadas por Trama Urbana de diario HOY, el hecho tuvo lugar en la zona de 506 y 220, cuando los damnificados se encontraban en su hogar. Dentro de la vivienda estaba un hombre de 63 años, su esposa de 60 y su hijo de 23, cuando abruptamente un grupo de maleantes ingresó al lugar.

Rápidamente los redujeron, los maniataron y los amenazaron con armas de fuego, para luego exigirles que les entregaran todo el dinero que tenían. Tal fue la violencia con la que actuaron los hampones, que para amedrentar a las víctimas le dispararon en la pata al perro de la familia.

Cabe mencionar que circuló una versión en la que se aseguraba que los maleantes habían ido más allá y que habían amordazado a los presentes, luego encerraron a uno en el placard y hasta amenazaron con secuestrar al joven. Sin embargo, todo eso fue desmentido por voceros oficiales.

Lo cierto es que, luego de recorrer cada rincón del inmueble, los ladrones se apoderaron de una gran cantidad de objetos de valor, dinero en efectivo (cuya suma no trascendió) y otros elementos, los cuales cargaron en la camioneta Chevrolet Spin de la familia, para darse velozmente a la fuga.

Ya sin la presencia de sus captores, las víctimas lograron liberarse y dieron aviso de inmediato a la Policía. Entonces, varios patrulleros realizaron un operativo cerrojo en las inmediaciones con el objetivo de poder dar con los implicados. Sin embargo, no los encontraron, aunque sí fue hallado en 510 y 216 el rodado que los sospechosos habían sustraído. Pero ya no había nada allí.

En cuanto a los damnificados, más allá del mal trago vivido y de las lesiones que sufrieron por el ataque de los maleantes, la salud de ninguno de ellos estaba comprometida y su vida no corría peligro. De igual forma, fuentes aseveraron que el can baleado “estaba bien” y no corría riesgo su vida.

En lo que respecta a los autores del hecho, al cierre de esta edición nada se sabía de ellos y continuaban siendo intensamente buscados por la Policía. El hecho fue caratulado como “robo” y es llevado adelante por la DDI local. Interviene la UFI en turno.