TUCUMÁN

A una semana de haber sido condenado, se fugó el asesino de Milagros y Benicio

El asesino Roberto Rejas se escapó del Cuartel de Bomberos de la capital, donde cumplía la preventiva hasta que su sentencia quedara firme.

A menos de una semana de haber sido condenado en Tucumán a la pena de prisión perpetua por la desaparición y muerte de Milagros Avellaneda y de su hijo Benicio, de apenas dos años, el asesino Roberto Rejas se escapó del Cuartel de Bomberos de la capital, donde cumplía la preventiva hasta que su sentencia quedara firme.

Según las primeras versiones, el exguardiacárcel habría pedido permiso anoche para ir al baño y se fugó así, entre las 21 y las 23, por una ventana que había en el lugar. Las autoridades pidieron la colaboración de los vecinos para dar con el prófugo, que al momento de evadirse vestía una remera blanca, pantalón de gimnasia y zapatillas negras. Además, remarcaron que se habría cortado el pelo muy corto y que está afeitado.

Rejas había recibido prisión preventiva hasta que la sentencia quede firme precisamente porque el tribunal consideró que había peligro de fuga.

Por un fallo unánime, Roberto Rejas fue condenado el jueves de la semana pasada a prisión perpetua por el femicidio de su pareja, Milagros Avellaneda, y el crimen de Benicio, el hijo de dos años que ambos tenían en común, cometidos en 2016 y cuyos cuerpos todavía no fueron encontrados.

Después de una audiencia que se extendió durante más de 10 horas, los jueces encontraron culpable al expolicía por los delitos de homicidio agravado por violencia de género y alevosía y dispusieron que permanezca bajo prisión preventiva por seis meses hasta que la sentencia quedara firme.

En la misma resolución, los magistrados aclararon que si el condenado decide aportar datos acerca de dónde ocultó los cuerpos de las víctimas, se reconsiderará la pena impuesta. En el mismo veredicto absolvieron a Estefanía Ávila, pareja de Rejas, y a Marcelo Fabián Gómez, quienes habían llegado al debate acusados por el delito de encubrimiento agravado.

De acuerdo con la investigación del caso, Milagros y Benicio fueron vistos por última vez el 28 de octubre de 2016 cuando salieron de su casa, ubicada en el Barrio Lola Mora, donde ambos vivían junto a otro hijo de la mujer y a su madre Amalia Ojeda, abuela de los chicos. Ese día, según consta en la causa, los dos estuvieron en la zona del Parque 9 de Julio a bordo del auto de Rejas, a quien la mujer le reclamaba que reconociera al hijo de ambos.

En ese momento Milagros le envió mensajes a una amiga, en los que le manifestaba que el ahora condenado la estaba golpeando. Esa fue la última actividad que se registró en el celular de la joven, quien al igual que el nene no volvió a tener desde ese día contacto con ninguno de sus allegados. La principal hipótesis sostiene que fue en ese momento en el que el Rejas los asesinó e hizo desaparecer los cuerpos.

Tras conocerse la noticia de que Rejas se había escapado, varias organizaciones sociales y feministas expresaron su indignación en las redes por lo ocurrido y reclamaron además protección para la familia de la víctima, debido a que el asesino está suelto.

“Hace apenas un par de horas se confirmó la noticia de que Roberto Rejas se fugó de la división Bomberos. Si tenemos que ser más claras, debemos decir que lo ayudaron a escapar...No podemos dejar de mencionar que parte de la fila. Rejas pertenece a la fuerza policial federal”, consideró a través de un comunicado en Facebook la Multisectorial de Mujeres de Tucumán.

Y agregaron: “Es indignante que luego de la condena y teniendo un voto en oposición para el alojamiento en bomberos, haya podido fugarse. Queremos y exigimos una investigación clara que condene a los responsables y cómplices de tamaña fuga...la de un femicida, que además mató a su hijo, que no tembló ni un segundo en el juicio y que además oculta en perverso secreto los cuerpos. Lo ocurrido es una provocación y una burla a la familia de las víctimas”.