Agredieron con un martillo a dos jubilados durante una entradera en Los Hornos

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na violenta e indignante entradera se registró en la localidad platense de Los Hornos, que tuvo como víctimas a un matrimonio de jubilados, quienes además de sufrir el asalto, fueron brutalmente maltratados, golpeados con un martillo y con la culata de un revólver. Los ladrones permanecieron revolviendo todos los rincones durante más de dos horas y luego escaparon con un botín compuesto por un auto, dinero en efectivo, joyas y demás elementos de valor.

De acuerdo a la información a la que accedió diario Hoy, el episodio se registró cerca de las nueve y media de la noche de ayer, en una casa ubicada en la zona de las calles 131 entre 64 y 65. Hasta allí se dirigieron al menos tres sujetos armados, quienes ingresaron a la propiedad por la parte de atrás y una vez que ganaron el interior encañonaron, golpearon y maniataron a sus moradores.

La pareja de ancianos estaba durmiendo, pero la mujer escuchó algunos ruidos extraños y luego todo se convirtió en una pesadilla. Al oír movimientos raros, despertó a su marido para avisarle. Cuando el dueño de la casa, un hombre de 75 años, se levantó y se dirigió hacia la cocina, divisó a uno de los malvivientes y atinó a empujarlo, pero este le respondió con un furibundo culatazo en la cabeza, garantizando que entraran a la finca sus otros dos cómplices.

Producto del fuerte golpe, el jubilado sufrió un profundo corte en su cuero cabelludo que hizo que su cuerpo se cubriera de sangre. En ese instante, uno de los ladrones se apiadó, se acercó hacia él y con el agua de la pava comenzó a lavarle la herida, mientras los otros individuos, lejos de sentir compasión o remordimiento, continuaban buscando elementos para llevarse.

En todo momento, los delincuentes actuaron con vehemencia y les exigían dólares que la pareja no tenía, ya que reciben ayuda por parte de sus hijos para poder subsistir. Era tanta la obsesión de los maleantes por la moneda estadounidense, que hasta agarraron un martillo ablandador de carne con el cual rompieron parte del techo creyendo que los damnificados escondían los billetes adentro del cielorraso.

Dos horas y media de terror

Con ese mismo objeto también agredieron a las víctimas, insistiendo en el pedido de dinero en un episodio que duró más de dos horas y media a pura tensión. En un momento dado, le preguntaron por uno de sus hijos y le dijeron que lo tenían secuestrado en la camioneta, amenazándoles con matarlo si no les daban los dólares, pero la mujer enseguida se dio cuenta que en realidad se trataba de un engaño.

Finalmente, los delincuentes se alzaron con 50.000 pesos que la señora tenía guardados en un monedero, que los estaba atesorando porque se debe someter a una operación. Además, les quitaron las llaves de su automóvil y se dieron a la fuga a bordo del Peugeot 308 que pertenecía a las víctimas, adonde además cargaron joyas y otros elementos sustraídos.

Antes de huir se burlaron de la anciana y le dijeron que era una tarada, porque al tener una casa grande no habían puesto alarma. Tras salir de la finca, los ladrones se metieron a un comercio lindero de venta de indumentaria, donde forzaron la puerta, arrojaron objetos al piso y se llevaron el dinero que había quedado en la caja registradora.