VIOLENTO ASALTO

Asalto en un campo de polo de La Plata: se llevaron autos y unos 400 mil pesos

Fueron “entre 7 y 8 delincuentes” que estaban fuertemente armados y que “entraron caminando” al campo según uno de los damnificados

Los ladrones ingresaron a un establecimiento y lograron reducir a todos los integrantes de la familia. La hija menor de una de las víctimas les confesó a los delincientes dónde estaba el efectivo para que le dejaran de pegar a su padre

Son intensamente buscados por los efectivos policiales los cinco delincuentes que protagonizaron una violenta entradera en la zona de Lisandro Olmos, en la que se llevaron al menos 400.000 pesos en efectivo - entre dólares y pesos - , armas de fuego, electrodomésticos dos automóviles de la casa y otro vehículo que robaron en la huida.

El hecho, que fue primicia de Diario Hoy, sucedió el viernes pasadas las 21 en el barrio cerrado La Enriqueta, ubicado en Ruta 2 a la altura del kilómetro 60. Hasta allí llegaron los malvivientes que violaron la seguridad del lugar y perpetraron un brutal asalto, golpeando salvajemente a una de las víctimas.

Según contó un hijo del propietario del lugar, los asaltantes comenzaron a “pegarle culatazos” a su papá y “le pusieron un arma en la cabeza” a la menor, hasta que finalmente la niña les dijo dónde estaban los ahorros de la familia para evitar que siguieran golpeando al hombre de 75 años.

Los ladrones lograron llevarse una importante suma de dinero, tanto en dólares como en pesos, además de 10 armas y cerca de 30 cuchillos.

Además, se hicieron de varios adornos de plata que estaban colgados en la pared, un microondas, una estufa, una desmalezadora, televisores y una hidrolavadora. Todo lo cargaron en dos autos que también estaban en el club: una camioneta Fiat Cubo y un Chevrolet Corsa.

Pero el mal momento no terminó ahí, ya que después los agresores ataron a todos los ocupantes de la casa y se subieron a estos vehículos para continuar robando en las otras viviendas que se ubican en el mismo predio.

“Pasaron por todas las casas que hay en la propiedad. Nosotros tenemos como unas caballerizas que tienen dormitorios, entraron ahí también y se fueron llevando todo. Todo lo que pudieron robar, se lo robaron, lo metieron en las dos camionetas", precisó

El joven cree que los delincuentes “tenían algún dato” del lugar porque, entre otras cosas, estaban al tanto de que hay “una persona de seguridad que llega a las 9:30”, por lo que cometieron el asalto en poco más de una hora y se retiraron justo antes de que empezara el turno de este guardia.

Además, en varias oportunidades los asaltantes conversaban entre ellos y se decían frases como “mirá que va a venir el vigilante”, lo que llamó aún más la atención de las víctimas.

Por otra parte, según los dichos del joven, los integrantes de esta banda “sabían el nombre” del dueño de la estancia y el jefe de ellos “parecía ser policía” por la forma en la que hablaba. Por todo esto es que sospechan que, por lo menos, "algún trabajo de inteligencia hicieron”.


Los asaltantes huyeron del lugar en los dos vehículos familiares, pero en el camino se encontraron con un tercer petisero, quien más temprano había salido a comprar pizza con su propio auto sin saber lo que iba a pasar.


“Cuando lo vieron, primero le hicieron señas con las luces, pero después lo obligaron a frenar, algunos de los delincuentes se bajaron y se lo llevaron secuestrado hasta que finalmente lo liberaron en Florencio Varela”, relató el hijo del dueño del lugar.


“A nosotros nos impactó mucho toda esta situación porque este era un lugar de mucha paz, acá en el campo nunca pasaba nada extraño, era hacer todos los días asados, vivir tranquilo, ahora nos cambió la visión de las cosas. A mi viejo lo tuve que traer para Buenos Aires, los petiseros no quieren dormir en sus viviendas”.