MISIONES

Asesinaron a puñaladas a un jubilado y detuvieron a cinco sospechosos

La víctima tenía 79 años y vivía en la localidad de Alem. Hace una semana mataron a otro hombre.

Un jubilado de 79 años fue encontrado muerto en su casa de la localidad misionera de Leandro N. Alem. Tenía un profundo corte que le atravesaba el cuello, y por el homicidio fueron detenidos cinco sospechosos.

Los vecinos del barrio San Martín avisaron a la policía que inmediatamente llegó hasta la casa ubicada sobre la calle Corrientes donde vivía Rufino Blanco. Al entrar a la vivienda, lo encontraron tirado en el suelo en medio de un charco de sangre.

La policía científica de la Unidad regional VI, como también el médico de turno, informaron que la víctima presentaba un “corte transversal en cara lateral izquierda y anterior del cuello”.

A los uniformados les llamó la atención que encontraron las dos puertas de acceso a la casa cerradas con candados. Rufino vivía solo y le faltaba el celular.

En las última horas fueron detenidos cinco sospechosos de 31, 54, 59, 19 y 16 años. En la casa de dos de ellos secuestraron varios celulares, cuchillos y prendas de vestir con manchas presumiblemente de sangre.

José Antonio Fernández de 66 años, vivía en una casa ubicada la Ruta Nacional 14, frente al destacamento de guardaparques de Piñalito Sur. El pasado 26 de noviembre lo mataron a puñaladas.

El cuerpo lo encontró su hermano con signos de tortura. El diario El Territorio informó que estaba atado de pies y manos y además tenía en el cuello “gomas utilizadas para el uso médico”. También presentaba heridas punzocortantes en la zona del tórax.

En principio, los investigadores descartaron la hipótesis del robo porque en sus bolsillos encontraron la plata que había cobrado de su jubilación días atrás. Además, la casa no estaba revuelta.

Fernández vivía solo en el Paraje Piñalito Sur, perteneciente al municipio de San Pedro, una zona rural con pocas casas y mucha tranquilidad. La víctima atendía un kiosco que había abierto hacía un tiempo en su vivienda.

En sus últimos años de trabajo se desempeñó en diferentes funciones para una maderera. Su oficio siempre fue maquinista de motoarrastradoras y cargadoras de madera. También trascendió que uno de sus hijos es efectivo de la Policía de Misiones y se desempeña en la División de Seguridad Vial de Bernardo de Irigoyen.

Este crimen ocurrió tan sólo una semana antes del asesinato de Rufino Blanco, otro jubilado que también vivía solo en su casa de la localidad de Leandro N. Alem, y por el que hay cinco detenidos.