Lola Chomnalez

Caso Lola Chomnalez: absolvieron a "Cachila", el primer procesado de la causa

Se trata de Ariel Moreira, conocido como "El Cachila", por quien pedían una condena diez años de prisión.

La Justicia absolvió al “Cachila”, el primer procesado en el caso de Lola Chomnalez. Se trata de Ariel Moreira, un cuidacoches que había sido acusado por encubrimiento y estaba en prisión preventiva desde 2019.

La fiscal del caso, Jéssica Pereira, solicitó en el mes de mayo una condena a 10 años de prisión. Sin embargo, el juez Jimenez Vera lo absolvió tras un intenso trabajo de la defensa de oficio.

Durante los primeros meses de investigación, "Cachila" admitió haber tenido contacto con la chica en sus minutos finales, pero su ADN no apareció entre los objetos de la víctima.  

Moreira permanecía detenido desde el 20 de mayo de 2019 cuando fue aprehendido por segunda vez, luego de que en 2015 sea liberado rápidamente por falta de pruebas. Sin embargo, según los peritajes psiquiátricos y psicológicos, lo destacan como un hombre agresivo y poco paciente, sin posibilidad de controlar sus impulsos.

Los exámenes de ADN que se hicieron en las dos manchas de sangre que se encontraron en una tolla y una cédula dentro de la mochila de la adolescente descartó un total de 40 personas que fueron indagadas durante los siete años del caso, incluido el de Ángel Moreira.  

"Cachila" fue en un principio el principal sospechoso, ya que admitió cruzarse a Lola, ofrecerle una "estampita" aquella noche del 28 de diciembre de 2014 cuando la joven fue asesina por asfixia contra la arena. Según Moreira, camino un rato junto a Lola, y ella le dijo que se sentía "mareada". La joven se sienta en la arena, y el acusado al no sentirle pulso, se asustó y se fue del lugar.

Lo que más llamó la atención para los investigadores, fue el detalle del relato de Moreira, donde expresa que la víctima se sentía mareada. Sin embargo, tras poco más de tres años de prisión efectiva, "Cachila" saldrá en libertad.

Por otra parte, la causa sigue avanzando y el mes pasado detuvieron al principal sospechoso del crímen, donde las prueba de ADN jugaron un papel importante.

El sujeto fue detenido en la localidad de Chuy, donde trabajaba como panadero. Se trata de un hombre de 39 años con antecedentes: delitos por lesiones personales en 2003 y violación en 2009.