Con la Policía ausente, los ladrones copan las calles platenses

Una serie e entraderas volvió a dejar en manifiesto el calvario que viven los platenses en materia de seguridad y, para colmo de males, en ninguno de los sucesos se logró la detención de los implicados. 

Por un lado, un joven de 25 años salía con su auto de una vivienda de 414 y 30 de Villa Elisa cuando lo sorprendieron tres intrusos, con una picana. Lo obligaron a ingresar a la casa, donde estaban sus padres. Los amenazaron a todos y encerraron al perro en el baño. Tras revisar cada rincón del lugar, se apoderaron de $50.000, dos celulares y huyeron en el vehículo de los damnificados, que apareció luego. 

A su vez, tres malhechores ingresaron a un inmueble de 485 entre 131 bis y 132 de Gorina, donde dormía una joven. La levantaron, la maniataron y le taparon la cabeza, para después robarle dinero en efectivo y otros elementos de valor. Los cacos cacos se fueron dejándola atada y fue la madre quien la rescató, cuando llegó al hogar. 

Pese a la gravedad de los casos, las autoridades policiales no pudieron dar con ninguno de los delincuentes.