Crimen en Villa Castells: conmoción en la zona

El crimen de Rodrigo Rivero, un albañil de 54 años de nacionalidad paraguaya, se convirtió en el tercero en apenas tres días, y el número 42 en lo que va del año, el doble que los cometidos a esta altura durante 2019, y 12 más que en todo ese año.

El cuerpo del hombre, que vivía solo en una casa de 4 y 495 de Villa Castells, estaba en su habitación, y tenía un fuerte golpe en la cabeza, mientras que en la finca los policías que trabajaron en el lugar encontraron un gran desorden. De esta manera, la principal hipótesis del homicidio es la del robo.

Fue su hermano quien descubrió el cadáver, cuando fue a buscarlo a su casa. Como no respondía los llamados, ingresó a la propiedad y a través de una ventana vio a su familiar, tirado en el piso.

Según los vecinos del área, Rivero era “muy trabajador y humilde”, y aseguraron que ya le habían robado otras veces. “Los delincuentes sabían que vivía solo y aprovechaban eso”.

Ahora la justicia analiza si los asesinos entraron al lugar a través de una medianera, tras ganar primero el interior de la finca de un vecino suyo.