ABUSO INTRAFAMILIAR

Denunció a su padrastro por abuso, fue hostigada y amenazada, y se tuvo que ir de La Plata

Estefanía L., de 21 años, denunció a la pareja de su mamá hace más de un año y la causa todavía no tuvo avances.

Estefanía L. de 21 años necesita ser escuchada: por el Poder Judicial, por la fiscal a cargo de su causa y por quienes, como ella, fueron víctimas de abuso sexual intrafamiliar en la infancia o adolescencia: "porque pienso en mí y en todas", expresó en una publicación que compartió en redes sociales, días atrás, donde relataba parte de su calvario. 

Estefanía es oriunda de La Plata, y a principios del año pasado tuvo el valor de exponer su historia y la pesadilla que padeció desde que tenía 11 años, y durante 7 años.

Acompañada por su expareja y sus amigas, Estefanía se acercó en marzo de 2021, a la DDI La Plata y denunció a su abusador: R.R, de 60 años, su padrastro. 

El trámite del expediente recayó en la Fiscalía N°2, a cargo de Betina Lacki, y con la intervención del Juzgado de Garantías N.º 1. 

Desde aquel momento, Estefanía asegura que no ha habido avances en la investigación: "cada vez que me acerco a la fiscalía, la persona que me atiende en mesa de entrada se fija en la computadora y me dice que no hay nada para hacer", relata la joven. 

Y agrega: "hace tres días llamé por teléfono a fiscalía para poder hablar con la instructora, y la respuesta fue que estaba con mucho trabajo y ocupada. ¿Y yo qué soy? ¿no soy trabajo?". 

Según contó en diálogo con este medio, el segundo capitulo de su pesadilla comenzó una vez que realizó la denuncia contra este sujeto: Estefanía comenzó a ser hostigada, violentada verbalmente y amenazada. Todo este maltrato provenía, nada más y nada menos, que de su madre. 

"Cualquier persona se da cuenta que si una madre no defiende a un hijo es porque algo pasa; ¿y cómo la Justicia no se da cuenta de eso?", sostiene. 

"Mi mamá sigue en pareja con este hombre. Nunca me defendió, nunca pude dialogar con ella. Cuando se enteró de la denuncia, no me dejaba en paz, al igual que a todas las personas que me acompañaban", relata. "Me iban a buscar a mi domicilio, me llamaban por teléfono, iban a la salida del gimnasio donde entrenaba. Era imposible tener una vida tranquila en esa ciudad". 

Desde octubre de 2021, Estefanía tuvo que mudarse a San Carlos de Bariloche, y dejar así su ciudad natal. "¿Se dan cuenta que me tuve que ir yo siendo la victima? ¿De qué lado está la Justicia?", se pregunta Estefanía, visiblemente angustiada.

Hasta el día de hoy, ese hostigamiento continúa: quienes defienden a este hombre buscan desacreditar el relato de Estefanía diciendo que "tiene problemas psiquiátricos" y que su único objetivo sería, "destruir una familia". 

"Mi mamá me ensucia con causas que supuestamente hice. Primero mi papá biológico jamás abusó de mí; ella me obligó a que yo diga eso cuando era muy chiquita, y esa causa está a su nombre", aclara. 

Estefanía exige ser escuchada: "hace un año mandé a fiscalía un pendrive con audios con las agresiones por parte de este hombre y de mi madre, y todavía no los escucharon", asegura. 

"Mi mamá es cómplice. En esos audios se puede escuchar la complicidad", explica Estefanía quien agrega: "Este hombre me dañó durante más de 7 años. La herida continúa y la tengo que tratar en terapia. Él ya tiene 60 años, ¿cuánto tiempo va a pagar por todo este daño?".

Cabe aclarar que Estefanía actualmente no cuenta con restricción perimetral ni asistencia psicológica. Aún así, a pesar de todo este panorama, cierra la nota diciendo: "agradezco todos los mensajes de apoyo que estoy recibiendo de la gente, me dan fuerzas para que pueda seguir adelante".