AL NEUROPSIQUIÁTRICO

Envían a un neuropsiquiátrico al agresor de Berisso que apuñaló a dos bailarinas

En un peritaje, una psiquiatra legista consideró que Sebastián Damián Villareal refiere padecer “alucinaciones auditivas” y “visuales”, de las cuales “se defiende rezando, respirando y bailando”.

Sebastián Damián Villareal, el acusado de haber herido a puñaladas a dos bailarinas en una escuela de danzas del barrio porteño de Palermo, dice que sufre "alucinaciones" y será internado en una institución neuropsiquiátrica para ser diagnosticado y tratado hasta que no constituya un peligro para sí o para terceros, informaron fuentes judiciales.

La orden de internación se basó en el peritaje de una psiquiatra legista que consideró que el detenido refiere padecer "alucinaciones auditivas" y "visuales", de las cuales "se defiende rezando, respirando y bailando".

Fuentes judiciales informaronque hasta tanto no se encuentre un establecimiento de Salud Mental adecuado, Villarreal seguirá internado con custodia policial en el Hospital Tornú y que, debido a su estado, no será indagado por la justicia.

De acuerdo a la psiquiatra legista, corresponde la "remisión a institución neuropsiquiátrica para diagnóstico y tratamiento hasta cesar su peligrosidad para sí o para terceros".

Al examinar al acusado, la perito determinó que se encontraba "vigil, lúcido, angustiado, pueril, globalmente orientado, con conciencia de situación y sin conciencia de enfermedad, colaborador activo, con pensamiento de curso normal y contenido concreto".

Según el informe, al momento del examen el acusado no impresiona tener "alteraciones sensoperceptivas"; sin embargo, refiere padecer las alucinaciones mencionadas con "ideación delirante persecutoria focalizada en un pai umbanda con el cual habría una causa de abuso sexual en la UFI 10 o 12, de la Plata".

Para la psiquiatra, también presenta "ideación delirante erotómana (fases de enamoramiento-desilusión –paraje al acto) focalizada en la docente ´Juli´ de baile, con juicio desviado".

A su vez, el acusado "niega ideación auto heteroagresiva" al momento del examen, que "hoy puede volver a casa y pedirle perdón a Juli", y que "quiere volver a tomar clases con ella".

En base a los resultados de este primer examen, la perito arribó a un diagnóstico presuntivo que indica que el acusado presenta una "descompensación psicótica en trastorno psicótico crónico y retardo mental".