Escalofriante entradera: dos ancianos fueron golpeados en Gonnet y les robaron $180.000

Un matrimonio de ancianos sufrió un bestial robo en Gonnet, cuando tres delincuentes ingresaron a su vivienda y los golpearon salvajemente para que les entregaran sus pertenencias. Tras varios minutos de tensión, los malvivientes escaparon con dinero en efectivo. Incluso, antes de irse les provocaron varias heridas a las víctimas.

Toda la secuencia ocurrió en horas de la madrugada del miércoles en una casa de 510 y 9 bis, donde reside una mujer de 91 años junto a su esposo de 88. Hasta ese lugar se dirigieron los hampones, quienes, armados con cuchillos, encapuchados y utilizando guantes, irrumpieron en el domicilio y despertaron a sus moradores exigiéndoles dólares.

Para poder entrar, rompieron los barrotes de hierro de las rejas con un cortafierros y se metieron por la ventana. Enseguida fueron hasta la habitación en la cual ambos jubilados estaban descansando, los levantaron abruptamente y comenzaron a pedirles dinero. Lejos de resistirse, los damnificados les dieron una suma cercana a los $180.000 que tenían guardados para realizar algunas compras.

A pesar de que en ningún momento se negaron a darles lo que exigían, los ladrones los atacaron igual. Empujones, golpes, zarandeos y hasta cortes en los brazos con una trincheta fueron algunos de los tormentos que sufrieron los ancianos durante alrededor de una hora, que fue el tiempo que los cacos permanecieron en el interior del su hogar.

Huyeron y los dejaron con serias lesiones

En el lapso que estuvieron adentro de la vivienda, los delincuentes se dedicaron a revolver todos los rincones y a causar destrozos. Pero, sobre todo, lo que más hicieron fue agredir violentamente a las víctimas. Según trascendió, al hombre le propinaron un fuerte golpe en la cara para que no se levantara y a su esposa, uno de los sujetos la tomó de los brazos y le sacudió la cabeza contra la almohada.

Finalmente, se dieron a la fuga sin ser identificados, con el dinero en efectivo, un anillo, cadenas de oro, relojes y algunas joyas que encontraron en la casa. Por su parte, la mujer tuvo que ser hospitalizada, ya que por la ferocidad del ataque sangraba uno de sus oídos.