Inseguridad

Indignante robo en un colegio platense obligó a suspender las clases

Ladrones ingresaron a un centro educativo donde funciona una secundaria y una primaria. Se llevaron computadoras y alimentos del comedor.

Otro colegio platense se quedó sin clases ayer por cuestiones ajenas a las autoridades, indicaron fuentes oficiales. Estas señalaron que sujetos desconocidos ingresaron en las últimas horas a las instalaciones del establecimiento educativo. No solo se llevaron diferentes elementos de valor sino que también causaron destrozos. Lo peor es que no se trató de un caso aislado sino de una reiteración de episodios similares en el lugar.

De acuerdo a los voceros consultados por este multimedio, el nuevo suceso de inseguridad en las calles de nuestra ciudad se registró en la escuela secundaria número 72 y la primaria 49, emplazadas en 137 entre 85 y 86. Hasta allí se acercaron los hampones durante la noche del jueves y ganaron el interior sin llamar la atención de los vecinos ni de los lugareños. Una vez adentro, hicieron de las suyas.

Sin pérdida de tiempo enfilaron hacia la dirección, donde rompieron la puerta y se alzaron con varias computadoras que allí había. Claro que no se conformaron con eso y entonces continuaron con la recorrida.

Sucesión de atracos

En la misma llegaron hasta el comedor que allí funciona y no dudaron en apropiarse de manera ilegal de los alimentos que hallaron y que están destinados para los niños que asisten a clases. Incluso destrozaron solo por placer mesas y sillas. Consumado el desastre, y con el botín asegurado y en su poder, se dieron a la fuga.

En este punto, los pesquisas sospechan que lo hicieron a bordo de un vehículo, donde cargaron las computadoras. Por lo pronto, los agentes de la Fuerza están analizando las cámaras de seguridad de las inmediaciones para ver si en alguna de ellas quedó registrado el suceso, que hasta el cierre de esta edición se mantenía impune.

Las autoridades del colegio relataron que durante la pandemia sufrieron una gran cantidad de robos, todos correctamente denunciados. Pese a eso, la Policía nunca logró capturar a ninguno de los sospechoso.

“Es una pena porque antes funcionaban talleres de panadería y música, que por los robos tuvieron que cerrarse”, indicó un allegado al sitio asaltado.

En los otros ilícitos sufridos, los malvivientes ya se habían llevado hornos, heladeras y hasta instrumentos musicales.

Debido a las pérdidas materiales y a las diferentes roturas, las autoridades del establecimiento tuvieron que suspender las clases del viernes y recién volverán a trabajar a partir del lunes, luego de la labor en la zona de los peritos de la Policía Científica.