Lo que faltaba: robaron un kiosco a metros del Servicio Penitenciario Bonaerense

Una casa de comidas fue asaltada este mediodía en La Plata, pero lo que más llamó la atención fue que el hecho se produjo nada menos que a metros del Servicio Penitenciario Bonaerense, un lugar que está repleto de policías de custodio. 

En otro gravísimo suceso de inseguridad en una ciudad minada de robos, en esta oportunidad dos motochorros se acercaron hasta el comercio de razón social Mar de Ollas, a plena luz del día ya que recién era mediodía. Uno de los cacos, de unos 25 años y con barbijo, entró y saludó. El empleado que estaba en ese momento limpiando unas cosas en la bacha se acercó y entonces el maleante lo encañonó y le exigió la recaudación. 

Así se adueñó del dinero de la caja y de al menos tres celulares, para después llevar a las víctimas (dos empleados y el dueño) hasta el fondo, donde los dejaron encerrados. 

Lo más grave fue que, además del SPB, al lado hay un kiosco que estaba repleto de gente y había personas haciendo fila afuera para entrar. Entre ellos “hasta había policías”, se lamentó uno de los damnificados. Claro que los uniformados ni siquiera se enteraron que en sus narices se estaba produciendo un ilícito a mano armada. 

“La situación de inseguridad es un infierno”, se lamentaron los perjudicados, mientras que hasta el momento nada se sabe de los hampones.