Los rugbiers podrían ser separados y enviados a distintos penales

Una vez que los ocho rugbiers condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa escucharon su sentencia, fueron trasladados nuevamente hasta la alcaldía N° 3 de Melchor Romero, por disposición del Servicio Penitenciario Bonaerense. De esta manera, regresaron al lugar en el cual pasaron estos tres años en prisión preventiva. Allí estuvieron en pabellones propios y lejos de otros detenidos.

Sin embargo, a partir de la lectura del veredicto, la situación podría cambiar para algunos de ellos: el grupo podría ser separado y distribuido entre distintos penales. Cabe recordar que estos últimos días, mientras se desarrollaba el juicio en su contra, estuvieron alojados en la Unidad N°6 de Dolores.

A partir de ahora, desde el SPB definirán los destinos de cada uno de ellos en base a los pedidos de cupo que hagan los magistrados. En ese marco, los que recibieron una pena menor podrían recaer en el penal de Campana, el más cercano a la ciudad de Zárate de donde son originarios, para poder ser visitados por sus familiares.

Mientras tanto, es posible que aquellos que recibieron una condena de perpetua sean trasladados a una cárcel de máxima seguridad y una de las que aparece en la órbita es la de San Martín. De todos modos, el SPB no recibió ninguna notificación todavía, pero lo que es casi una certeza es que no permanecerán todos juntos.