Inseguridad

Robo y destrozos en un club de barrio de Tolosa

Los delincuentes escaparon con elementos de valor, pero también generaron daños. Profunda indignación entre los vecinos, quienes hablaron de “zona liberada”

Vandalismo y robo fue lo que sufrió en las últimas horas un club de Tolosa, hasta donde un grupo todavía no determinado de delincuentes se acercó con las peores intenciones y causó destrozos, además de llevarse elementos de valor.

El lamentable suceso, uno más en una ciudad sitiada por la inseguridad, tuvo lugar en el Club San Martín, emplazado en las calles 530 y 133. Hasta allí llegaron durante la madrugada y sin llamar la atención de nadie un conjunto de hampones, que lograron ganar el interior sin que nadie llegase a notarlo.

Una vez adentro del predio, se dedicaron a recorrerlo y a apoderarse de todo lo que consideraban de interés pero, no conformes, también produjeron serios daños. “Rompieron todas la rejas, abrieron el galpón y arrancaron a su vez todo los cables”, se lamentó un hombre que cumple funciones en el lugar, y agregó: “Dejaron todo roto y cortado”.

Las autoridades de la institución notaron luego que los ladrones terminaron escapando con cables, pelotas y hasta las canillas. Pese a eso, hasta el momento no se produjo detención alguna. Para peor, las autoridades policiales ni siquiera cuentan con datos precisos para dar con los implicados.

Tanto en el club como en el barrio la situación se vivió con bronca y profunda indignación, ya que consideran que “la inseguridad crece día a día y nosotros nos sentimos desprotegidos”. En tanto, una serie de frentistas no dudó en aseverar: “La zona está completamente liberada, y es cuestión de sumar dos más dos para darse cuenta. Cada vez que llamás al 911, no vienen o tardan una hora en hacerlo. ¿Por qué? Para darle tiempo a los delincuentes a huir”.

Enojo

Otro dijo: “Estamos solos en esto, porque nadie nos cuida, nos ayuda ni nos defiende. Vamos a tener que estar más atentos nosotros, pese a que para algo está la Policía y para eso se les paga un sueldo, que sale de nuestros bolsillos y nuestros impuestos”. Finalizó diciendo que “ya estamos hartos de los robos, a cualquier momento del día, y de la terrible impunidad. Esto es tierra de nadie”.