Trasladan a La Plata a la única detenida por el robo en el Grand Bell

Se trata de la única detenida por el robo en el country Grand Bell ocurrido el pasado 22 de abril. La acusada se encuentra arrestada en España y tras su arribo a Ezeiza deberá declarar ante la UFI n° 7 de La Plata.

Tras pasar cerca de ocho meses del millonario robo protagonizado por un grupo de delincuentes en el country privado Grand Bell, este jueves llegará al país la única detenida por el hecho. Se espera que una vez arribe a la Argentina se presente ante la Unidad Funcional de Instrucción nº 7 para prestar declaración sobre las acusaciones que pesan en su contra.

La citación se desprende de un oficio que confirma que, “por disposición del titular del Juzgado de Garantías nº 4 de La Plata, Juan Pablo Masi, se informa que Jésica Elizabeth Clavijo será extraditada desde España, donde actualmente se encuentra arrestada, después de haber sido atrapada en septiembre de este año en Madrid”.

En este sentido, Clavijo quedará alojada en la comisaría Primera, a disposición de la justicia y a la espera de presentarse ante el magistrado interviniente. Cabe recordar que la sospechosa, de 36 años, está imputada por el delito de “robo agravado por su comisión en poblado y en banda en concurso real con encubrimiento agravado por habitualidad”.

Otro dato que se desprende del caso es que, a pesar de haber sido arrestada en Europa, luego darse a la fuga poco después del asalto, hasta el momento no prestó declaración ante la justicia de nuestro país, por lo que en los próximos días deberá comparecer ante la UFI nº 7.

El hecho por el cual está siendo investigada ocurrió el 22 de abril, a las 19:20, en el barrio cerrado que está ubicado en la zona de la calle 467, entre 144 y 146, de City Bell, donde las cámaras de vigilancia del country registraron el ingreso de un automóvil marca Peugeot 208, de color gris, conducido por una mujer, en el que iban al menos cuatro hombres.

La implicada quiso ingresar con una tarjeta como la que tienen los dueños, pero no pudo hacerlo al ser esta apócrifa, por lo que el sistema electrónico la rechazó y la barrera no se levantó, impidiéndole el paso. Sin embargo, el vigilante les permitió la entrada y poco después se dirigieron hasta la vivienda que terminaron desvalijando.