Mendoza
Un doble femicida fue retirado de la sala por "maullar" en vez de responderle a la jueza
Nicolás Gil Pereg está acusado de asesinar a su madre y a su tía. Las víctimas fueron halladas enterradas en la propiedad del imputado.
El juicio por jurados contra Nicolás Gil Pereg, acusado de asesinar a su madre Pirhya Sarussi (63) y a su tía Lily Pereg (54), comenzó este martes en el flamante Polo Judicial. Tal como había sucedido en instancias judiciales previas, el imputado israelí ingresó maullando a la sala e interrumpió constantemente a la jueza técnica Laura Guajardo.
Debido a su mal comportamiento, la magistrada del Tribunal Penal Colegiado Nº 1 retó a Pereg, cuando le estaba consultando por sus datos filiatorios: "Señor Pereg, basta", le dijo Guajardo golpeando su mallete. Debido a que el imputado no se calmó, ordenó al personal penitenciario que lo sacara de la Sala 15, donde se desarrolla el debate.
De esa forma, Pereg deberá seguir el proceso desde una celda, a través de una transmisión en vivo, por una pantalla que se colocó previendo que podía llegar a ocurrir esa situación.
La jueza les aclaró a los defensores del acusado, Maximiliano Legrand, Lautaro Brachetta y Sebastián Garro, que, en caso de que su cliente desee regresar a la sala o declarar, se le notifique. Aunque deberá hacerlo "en silencio y con decoro", según publica el diario El Sol de Mendoza.
El juicio trata el doble crimen de Saroussi y Pereg, quienes fueron halladas enterradas en la propiedad de Pereg, ubicada frente al cementerio de Buena Nueva, Guaymallén, en enero de 2019.
La madre del acusado fue ultimada mediante estrangulamiento, mientras que su tía presentaba disparos de arma de fuego en el cuerpo. Los cuerpos de ambas habían sido depositados a dos metros de profundidad y estaban tapados con tierra y piedras.
Las mujeres llevaban dos semanas desaparecidas, después de arribar a Mendoza para visitar a Pereg. Fue el mismo acusado quien denunció el paradero de ambas, pero terminó detenido por los asesinatos e imputado por homicidio agravado por el vínculo y homicidio agravado por el uso de arma de fuego, delitos que prevén como única pena la prisión perpetua.
La Fiscalía, a cargo de Fernando Guzzo y Claudia Ríos, buscará que el jurado llegue a un veredicto por la pena máxima, mientras que la defensa intentará demostrar que su cliente es inimputable.