Neuquén

Un ladrón le robó las tarjetas a una jubilada y se gastó todo el dinero en el casino

Ana María Oliva le reclama a su banco el reintegro de más de $100 mil, pero aseguró que nadie le da respuestas.

Un ladrón le robó las tarjetas bancarias a una jubilada de 70 años en Neuquén y se gastó todo el dinero en compras online en el casino. La mujer le reclama al banco el reintegro de sus $105.000, pero aseguró que desde la entidad bancaria la tratan de mala manera y no recibe respuestas.

El calvario de Ana María Oliva comenzó el 27 de agosto pasado. Oliva había ido a la feria del Parque Central a comprar verduras en su bicicleta y mientras elegía los tomates, un ladrón le sacó su billetera y escapó.

De inmediato, ella se fue para su casa y realizó la denuncia por teléfono sobre el robo de sus tarjetas de crédito y débito. En ese momento, se quedó tranquila porque nadie había utilizado sus plásticos.

El lunes siguiente, Oliva fue hasta la sucursal del banco y le dijeron que 10 horas más tarde de su denuncia de robo, el ladrón le vació su caja de ahorro. El banco había bloqueado su tarjeta de crédito, pero no la de débito, donde tenía $104.000.

La jubilada está desesperada

“Le estoy solicitando al banco que me devuelva mi plata, yo llamé para avisar que bloquearan mis cuentas porque me robaron la billetera y ellos no lo hicieron”, dijo Oliva en diálogo con LM Neuquén.

Desde ese día, la jubilada fue en reiteradas ocasiones a una sede del banco y lo único que le dijeron fue que “el trámite está en el departamento de judiciales”. Además, la mujer sostuvo que hasta el momento subsistió con dinero prestado de sus amigos, que todavía no pudo devolver.

Oliva sumó además su descontento por sentirse “maltratada” en sus visitas al banco, donde nadie le suma información sobre el avance de su reclamo. Incluso, hasta le aconsejaron realizar la denuncia en defensa al consumidor. “Como admitiendo que ellos ya no pueden hacer nada”, remarcó.

En este sentido, pidió: “Necesito que me devuelvan mi plata, plata que con la inflación en la que vivimos ya no me alcanza para comprar lo mismo que hubiera comprado en agosto. Y no puedo creer el trato cada vez que voy, tuve una situación muy complacida con una empelada que no me dejaba ni hablar, solo me repetía que mi situación estaba en el departamento de fraude, la verdad ni la mínima empatía, se me caían las lágrimas”.

La víctima se asombró todavía más cuando supo qué compraron los ladrones con su dinero: “Se gastaron la mayoría de mi plata en el Casino Magic, se la timbearon. Una locura”.