CRIMEN

Un periodista fue asesinado de 18 puñaladas en su casa de Córdoba

El sospechoso tiene 22 años y conocía a la víctima. Se llevó el celular del periodista para que no puedan identificarlo, pero lo detuvieron.

Después de varias horas sin que respondiera sus llamados telefónicos la familia del periodista José Luis De Marco se acercó este domingo a su casa en el barrio Pueyrredón de la ciudad de Córdoba. Había manchas de sangre por todas partes y el hombre de 55 años ya estaba muerto.

Si bien en un primer momento se dijo que De Marco, quien en los ’90 era el conductor del programa “Habitar” por El Doce, tenía solo una herida en el cuero cabelludo, con el correr de las horas las pericias volcaron la investigación hacia un homicidio. La fiscal Claudia Palacios fue la encargada de confirmar que además lo habían apuñalado al menos 18 veces con un cuchillo.

El crimen del conductor ocurrió en el interior de la casa donde vivía en la calle General Deheza al 1300, de la capital provincial. A simple vista, solo faltaba el celular. Sin embargo, con el avance de la causa, la hipótesis del robo fue perdiendo fuerza y ahora creen que se trató de una maniobra del asesino para evitar que lo identificaran.

La estrategia no funcionó y el sospechoso cayó horas después en un procedimiento ordenado por la Fiscalía de 4° del distrito III de Córdoba. Según confirmó una fuente cercana a la causa a Télam se trata de Nahuel Palomeque, un hombre de 22 años que tenía antecedentes penales por distintos delitos y que era conocido de la víctima.

Para la fiscal, el detenido fue la última persona que estuvo con De Marco la noche del crimen, pero todavía es una incógnita cuál fue el motivo del asesinato. “Aún no tenemos claro el móvil ni cuál era la relación entre ambos”, sostuvo la representante del Ministerio Público, tras lo cual aclaró que la causa está bajo secreto de sumario.

Hace dos meses el crimen del productor audiovisual Bruno Vergagni conmovió a Tandil. El cuerpo de la víctima fue encontrado en su departamento. Lo habían asesinado a golpes.

Horas después, dos jóvenes de 18 y 22 años fueron detenidos acusados de haberlo matado para robarle. Los sospechosos eran conocidos de la víctima y al momento de ser arrestados tenían encima todavía el teléfono celular que le habían quitado a Vergagni.

Los medios locales publicaron entonces que el dispositivo delató la ubicación de los acusados al activarse en un determinado lugar y así los investigadores siguieron el rastro para dar con ellos.