Barracas

Uno de los policías sospechados de matar a Lucas ya había sido acusado

Se trata del inspector general, Gabriel Isassi, quien viajó a Río Gallegos en junio de 2016. Cristina Kirchner dijo que la casa de sus suegros había sido violentada a patadas.

Casi a la medianoche, el ministro de Seguridad porteño, Marcelo D'Alessandro, le pidió al juez Alejandro Cerrilluello que avance con la investigación contra el inspector general Gabriel Isassi, y los oficiales José Nievas y Fabian López, sospechados de asesinar a Lucas González.

El adolescente, de 17 años, fue acribillado de un balazo en la cabeza cuando volvió de jugar al fútbol en el Club Barracas Central.

Tanto Isassi como Nievas y López habían intentado culpabilizar a los futbolistas e instalaron la versión de que la balacera contra los jóvenes que ellos efectuaron se debió, en realidad, a "un enfrentamiento con delincuentes".

Sin embargo, la versión policial quedó descartada ante las evidencias recolectadas en las que quedó demostrado cómo los efectivos porteños interceptaron a los jóvenes, les dispararon y luego detuvieron a dos amigos de Lucas, menores de edad, durante 24 horas sin ninguna acusación en su contra. 

ANTECEDENTES

El 23 de junio de 2016, Cristina Kirchner relató que la casa de sus suegros (los padres de Néstor Kirchner) fue violentada, a las patadas, en una clara señal de amenaza. Lo que llamó la atención fue que unos pocos días antes se producía un misterioso viaje de seis oficiales de la Policía Metropolitana, entre los que figuraba el inspector implicado en la muerte de Lucas González.

En su relato, la expresidenta contó que los seis agentes fueron detenidos en el puesto control de ingreso a la ciudad, y cuando fueron consultados por los motivos de visita, dijeron que "estaban de paseo", según consigna Página 12.

Ante la sospecha, los policias locales decidieron revisar el auto en el que viajaban Isassi junto a Leonardo Ariel Salazar, Juan Matías Pez, Ruth Elizabeth Vera, Sergio Sebastián Sequeira y Mariela Fernanda Centurión. Y recién cuando los agentes santacruceños hallaron una pistola Glock en el vehículo, los oficiales de la Metropolitana decidieron cambiar su discurso y se presentaron como agentes que viajaron para "hacer unas diligencias procesales de allanamientos". 

"No sé si hicieron algún allanamiento. Lo que estoy segura, es que no vinieron de paseo", sostuvo Cristina Kirchner.