pijamadas del horror
Violó a su hijastra y a seis amigas de la nena: lo condenaron a 35 años de prisión
La Justicia lo condenó por dos de los siete casos de los que está acusado. Será sometido a un segundo juicio en septiembre.
La Justicia de Bahía Blanca condenó ayer a 35 años de prisión al hombre acusado de abusar sexualmente de su hijastra y de seis amigas de ella, durante las pijamadas que se organizaban en su casa del barrio Sánchez Elías. Todas las víctimas eran nenas de 11 y 12 años.
La causa que se conoció en los medios como “Pijamada del Horror” cerró su último capítulo este jueves al mediodía cuando el tribunal integrado por Daniela Castaño, Eduardo D´Empaire y Eugenio Casas, encontró culpable al acusado de los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante y abuso sexual con acceso carnal reiterados, ambos agravados por ser el autor encargado de la guarda de la víctima y promoción de la corrupción de menores agravada por la edad de la víctima y por la guarda.
La condena que se conoció en las últimas horas fue por dos de los siete casos de abuso de los cuales el hombre está acusado. El mes próximo está previso un segundo juicio por el resto de las víctimas, por lo que se le sumarían más años todavía tras las rejas.
Según lo publicado por los medios locales, durante los alegatos la fiscal Marina Lara había pedido 40 años de prisión para el único imputado mientras que, por su parte, el defensor solicitó su absolución. Lo cierto es que los testimonios escuchados durante las audiencias fueron contundentes y dieron por probado que el condenado les sacaba a las nenas fotos desnudas para después extorsionarlas.
“El imputado se aprovechaba de la confianza que depositaban las mamás por ser amigas las dos nenas y aprovechaba justamente la amistad con su hijastra para cometer los abusos”, se escuchó decir también durante el debate. Pero los abusos no solo se limitaron a las compañeras del colegio de su hijastra, sino que ella también era víctima de su perversión.
Al respecto, una tía de la chica aseguró frente a las cámaras apenas el hecho salió a la luz: “Este hombre obligaba a su hijastra a que lleve compañeritos a su casa. Él le decía que si traía a una amiguita, la dejaba de abusar”.
Después que se presentaran las dos primeras denuncias en su contra, el abusador escapó y se fue a la Ciudad de Buenos Aires, volvió a mudarse para despistar a los investigadores una vez más, pero finalmente lo capturaron en Coronel Pringles.