"Nuestro cliente está sumamente afectado, él es una víctima más"

Nicolás Rocca, el chofer del Volkswagen Nivus, uno de los autos protagonistas del accidente fatal en Maldonado que terminó con la vida de dos jóvenes modelos argentinas el pasado miércoles, quedó bajo custodia policial en el sanatorio Cantegril tras evolucionar favorablemente.

Rocca había dado positivo al test de alcoholemia que le realizaron tras el siniestro que ocurrió minutos antes de las 14 horas.

A su vez, el parte médico de ayer arrojó que el joven se recupera favorablemente en el instituto médico tras ser intervenido quirúrgicamente de una operación en su vejiga.

Los abogados uruguayos que patrocinan al joven productor de eventos y DJ argentino, participaron junto a él de una audiencia vía Zoom con el Fiscal de la causa. En este sentido, el Dr. Pablo Donnangello, su representante legal indicó que "estamos ante una tragedia realmente que ha impactado en todo Maldonado, en todo Uruguay y Argentina también".

Además, detalló que Rocca está sumamente afectado por lo ocurrido pero que afortunadamente cuenta con el apoyo de su familia y amigos que viajaron de Argentina para acompañarlo en este momento. "Nuestro cliente está sumamente afectado, él es una víctima más".

De cara a los siguientes pasos que se darán en la investigación y la actividad que tendrá la fiscalía, expresó lo siguiente. "Estamos esperando que comiencen las investigaciones técnicas que determinen su ausencia y resposabilidad en estos hechos. Cuando antes se esclarezca será mejor para la salud de nuestro cliente. Esperamos que en los próximos días la pericia técnica determina las condiciones en las cuales se produjo el accidente. También tenemos un peritaje por nuestra cuenta el cual se está desarrollando y es bastante bueno y contudente. Ahora hay que determinar si hay responsabilidad o no por parte de alguno de los choferes. Nuestro técnico nos ha dicho que nuestro cliente no tiene responsabilidad del accidente".

Según testigos que hablaron con Diario Hoy y la RED 92 en puertas del sanatorio, los vehículos no venían desde el mismo lugar, aunque sí se conocían todos los chicos entre sí.