PARO DOCENTE
Paro docente en La Plata: reclaman seguridad y repudian la violencia en las escuelas
Los gremios docentes bonaerenses realizaron un paro con movilización en La Plata tras una nueva agresión a personal educativo. Denuncian una escalada de hechos violentos y exigen medidas urgentes de protección.
;void(0);){kind=link}
La ciudad de La Plata amaneció este jueves con las aulas vacías y una fuerte protesta en las calles. Docentes de todos los niveles educativos realizaron un paro convocado por los principales gremios del sector, en repudio a los hechos de violencia registrados recientemente en escuelas públicas. La jornada incluyó una movilización desde las 10 de la mañana en Plaza Moreno bajo la consigna “La violencia no entra a la escuela”.
El detonante fue un violento episodio ocurrido en la Escuela Normal N°2, ubicada en diagonal 78 entre 57 y 5, donde una madre atacó físicamente a una preceptora y a la vicedirectora, además de amenazar al secretario de la institución. La agresión motivó la radicación de una denuncia formal ante las autoridades educativas y judiciales.
La medida de fuerza fue impulsada por el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación (SUTEBA), la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), la Unión de Docentes de la Provincia de Buenos Aires (UDOCBA), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y la seccional local de UDEB.
Desde SUTEBA indicaron que “los hechos de violencia no son aislados ni excepcionales, sino parte de una situación crítica que exige respuestas concretas del Estado”, y reafirmaron su compromiso con la escuela pública como “territorio de paz y de aprendizaje”.
El caso del Normal 2 se suma a otros dos episodios que encendieron las alarmas en mayo pasado: en la Escuela Secundaria N°1, padres ingresaron violentamente a la institución y agredieron al personal; y en la Secundaria N°8, una docente atacó al director en plena calle, junto a un hombre mayor armado con un trabavolante.
Los gremios denuncian el agotamiento del cuerpo docente ante la falta de políticas efectivas para prevenir este tipo de situaciones y aseguran que no permitirán que la violencia se naturalice en los entornos escolares. Además, reclaman la implementación de protocolos de intervención, mayor presencia de equipos profesionales y acompañamiento sostenido por parte del Estado.