Ciencia

Problemas en la NASA: el cohete que nos regresará a la Luna tuvo una fuga

En su cuarto y crucial ensayo, el Sistema de Lanzamiento Espacial que transportará la cápsula Orión sufrió una fuga de hidrógeno que hubiera interrumpido el despegue.

En el marco de Artemis, el programa de la NASA que pretende llevar humanos nuevamente a la superficie de la Luna, se realizó el cuarto y crucial ensayo general del cohete del Sistema de Lanzamiento Espacial. Conocido también como SLS, por sus siglas en inglés, transportará la cápsula Orión donde irán alojadas las próximas tripulaciones. Tal como indicó la agencia espacial, durante la prueba se detectó una fuga de hidrógeno en el abastecimiento de combustible. Si bien se “enmascaró” el problema de forma consciente para permitir seguir con el test, este fallo crítico hubiera obligado a interrumpir el despegue.

La prueba engloba desde el montaje del enorme cohete de casi cien metros de altura sobre la plataforma de lanzamiento hasta la cuenta regresiva, aunque sin llegar a despegar. El fallo afectó precisamente a la cuenta regresiva, que se paró 29 segundos antes del despegue virtual, cuando estaba previsto que se detuviera a los 9. Pese al imprevisto, se decidió seguir con la cuenta regresiva “engañando” al software, aunque en condiciones reales se hubiese abortado el lanzamiento. El fallo será estudiado en los próximos días y, a partir de aquí, se verá la ruta a seguir: si continuar con el calendario establecido o realizar pruebas adicionales.

“El equipo intentó arreglar la fuga primero calentando la desconexión rápida y, después, enfriándola para sellarla, pero no se solucionó el problema”, dijo Charlie Blackwell-Thompson, directora de lanzamiento de Artemis del Programa de Exploración de Sistemas Terrestres en el Centro Espacial Kennedy (KSC). “El equipo decidió que merecía la pena continuar a pesar de este contratiempo. Y, finalmente, la prueba ha sido un éxito, ya que hemos probado otros sistemas importantes, como el cambio de control del secuenciador de lanzamiento terrestre al secuenciador de lanzamiento automatizado controlado por el software de vuelo del cohete, o los sistemas de comunicación de la base con la cápsula Orión”.

No es la primera vez que la NASA ensaya este test. Hasta en tres ocasiones anteriores, la agencia espacial intentó llenar los tanques, pero solo se llegó hasta el 49% del tanque de combustible de oxígeno líquido de la etapa central y el 5% del tanque de hidrógeno líquido. Problemas con una válvula en la etapa superior del cohete –que fue reemplazada– y una fuga de hidrógeno en el mástil de servicio de cola –algo parecido a lo que ha ocurrido en esta última y cuarta prueba– provocaron la suspensión de las evaluaciones.