Científicos del CONICET descubrieron un dinosaurio con participación de un egresado de la UNLP

Una nueva especie de dinosaurio herbívoro de cuello largo fue dada a conocer en Neuquén por un equipo de paleontólogos del CONICET, con el trabajo de Sebastián Apesteguía, un investigador formado en la UNLP.

Este nuevo dinosaurio, bautizado como Sidersaura marae, era cuadrúpedo, tenía una larga cola, una masa estimada de 15 toneladas y una longitud de entre 18 y 20 metros. Los restos fósiles, correspondientes a cuatro ejemplares diferentes, fueron descubiertos en Cañadón de Las Campanas, localidad ubicada a 20 kilómetros de Villa El Chocón.

“Estos dinosaurios se caracterizaban por sus hocicos anchos tipo pato, que les facilitaban alimentarse de la vegetación baja, y por los huesos de su columna vertebral rellenos de espacios con aire (como en las aves), que les daban un peso mucho menor del esperable”, indicaron los investigadores.

A partir de estudios geológicos, los investigadores pudieron determinar que estos dinosaurios murieron en una zona barrosa cercana a un río y sus restos se descompusieron en ese mismo lugar. Luego, algunos animales carroñeros se llevaron algunos huesos y las crecidas del río arrastraron otros restos y desarmaron parcialmente los esqueletos.

Apesteguía es egresado de la facultad de Ciencias Naturales de la UNLP, investigador del CONICET, director del Área de Paleontología de la Fundación de Historia Natural Félix de Azara (que funciona en la Universidad Maimónides) y uno de los autores del trabajo.

El proyecto contó con financiamiento de la National Geographic, la Municipalidad de Villa El Chocón (Neuquén), la Fundación Azara y el Museo Field de Historia Natural de Chicago (Estados Unidos), del cual participó el investigador Peter Makovicky y la técnica Akiko Shinya.