Medio Ambiente
Convierten a la reserva rionegrina Islote Lobos en parque nacional
Es el número 40 en el país y el segundo de la provincia. Este multimedio habló con Greenpeace sobre la importancia de los parques y cómo cuidarse de la mano del hombre.
Islote Lobos es un archipiélago que lo componen seis peñascos: Lobos, La Pastosa, Ortiz Norte, Ortiz Sur, Redondo y De Los Pájaros. Recibe agua del golfo, en el departamento de San Antonio Oeste, a 50 kilómetros de Sierra Grande y de Playas Doradas. Se ubica en el centro del golfo San Matías, la reserva de pingüinos, lobos marinos de un pelo, cientos de aves y moluscos. Primero fue nombrado por Río Negro como un área natural protegida y a partir de ayer se convirtió en parque nacional, siendo el segundo en la provincia. La Ley fue sancionada por unanimidad por la Cámara de Diputados.
Esto no solo potenciará los proyectos turísticos en Río Negro y en la economía de toda la región, sino que también está la idea de construir un corredor turístico para conectarlo con el Nahuel Huapi, que es el primer parque nacional creado en la Argentina.
¿Qué importancia tiene?
“Desde el comienzo, siempre se trabajó en conjunto con el municipio de San Antonio y luego con referentes de parques nacionales que realizaron talleres con los vecinos de la zona”, dijo Dina Lina Migani, secretaria de Ambiente y Cambio Climático de Río Negro. Luego expresó que “se trabajó también con los propietarios de los campos de alrededor y ese fue el trabajo, unirnos, justamente para potenciar el lugar, la zona, todo lo que tiene que ver con lo social, lo económico y lo turístico”.
De esta manera, lo que se busca, además de lo que remarcó Migani, es poder darle mejor protección a los espacios de los lobos marinos de un pelo, o a la colonia reproductiva más al norte de pingüinos de Magallanes y los sitios de nidificación de estas y otras aves. Otros animales que se pueden ver son los lobos marinos de dos pelos, que son nativos de la región Antártica. El complejo también hay un sitio de cría del gaviotín real, una colonia de gaviota cocinera y nidos de especies de ambiente húmedo como biguás, garzas brujas, las moras y las blancas.
La palabra de Greenpeace
Este multimedio se comunicó con Greenpeace Argentina para hablar al respecto. Pablo, representante de la organización internacional, indicó: “Esto sirve, y sirve mucho. Pero a la vez puede ser tapar el sol con una mano. La Argentina sufrió muchísimo por los incendios pasados, que la mayoría fueron por mano del hombre. Estas medidas, las proteccionistas de nuestra propia biodiversidad y nuestro futuro en este lugar del planeta, dependen de ellas. Festejo que grupos de vecinos o lugareños se junten a plantar semillas de árboles centenarios que perdimos, pero es el Gobierno el que tiene que actuar, porque tiene poder político y el dinero para hacerlo, pasa que significa un gasto que no trae beneficios a corto plazo o directamente no trae beneficio económico. Parta ellos, la vida termina cuando mueren, no es para los que quedan ni para los que vienen, entonces no hay preocupación mundial por los lugares donde nosotros mismos vivimos”.