Vaca Muerta
La Provincia está lista para la exploración marina en busca de petróleo y gas
A pesar de las oposiciones, los permisos ya son una realidad y ahora dependerá de los resultados de la búsqueda saber si Buenos Aires será o no una provincia petrolera.
La noticia que llegó antes de finalizar 2021 y que marcaba que se habían aprobado los permisos para realizar estudios del subsuelo en tres áreas del Mar Argentino, debido a la posibilidad de hallar gas y petróleo, fue un alivio para el gobierno bonaerense, que tiene la intención de sentarse en la misma mesa de las diez provincias productoras de petróleo en nuestro país.
La pretensión del gobernador es que busca en una provincia que destila el 80% del crudo extraído de las entrañas del suelo argentino, poder ser parte de los beneficios que en el corto plazo pueda producir Vaca Muerta, y es por ello que encontrar un pozo del cual extraer el oro negro es prioritario.
Pero como en estos casos el beneficio de unos puede significar el perjuicio de otros, quienes salieron a protestar el martes último fueron los pescadores, que, aprovechando la afluencia turística, realizaron un “Atlanticazo” a lo largo de toda la Costa bonaerense.
Los pescadores se quejaron por la “exploración sísmica” (método que utiliza explosivos y vibraciones con los que se obtienen gráficos que producen las ondas sísmicas y que dan información de la forma y profundidad de los estratos en el subsuelo), ya que, según indicaron, afecta de manera determinante la fauna marina y perjudica su actividad.
“La exploración sísmica, primero, afecta a la fauna marina dañándola gravemente, nuestros pescadores ya lo vivieron, lo padecieron en las aguas del golfo de San Jorge, donde por más de un año intentaron pescar luego de realizada una exploración sísmica y no pescaron absolutamente nada”, indicaron los organizadores de la movilización en un comunicado.
A contramarcha de esta postura, desde el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG) salieron a relativizar los argumentos de quienes defienden la pesca como modo de subsistencia y realizaron algunas aclaraciones.
“La Argentina busca hidrocarburos en su mar desde hace más de 90 años. Desde entonces, se han perforado 187 pozos en el lecho marino”, indicaron.
También remarcaron que el 17% del gas que se produce en el país viene hoy de 36 pozos operativos en el mar y que el 70% de la electricidad también se produce con este combustible.
En las costas bonaerenses se realizaron desde 1960 unos 50.000 kilómetros de exploración sísmica y se perforaron 18 pozos; el último en 1997, todos sin consecuencias ecológicas, según el informe del IAPG.
También remarcan que “será la primera vez que las operaciones se hagan en aguas profundas y ultraprofundas; es decir, se llevarán a cabo en zonas muy alejadas de la costa, a cientos de kilómetros, en donde el mar puede alcanzar profundidades de hasta 4.000 metros”, indicaron, y remarcaron que “el punto más cercano a Mar del Plata, de hecho, son 307 kilómetros. Nadie en Mar del Plata verá plataformas ni petróleo”.
“Hablar de bombardeos acústicos, del fin de la vida en el Mar Argentino y de ciento por ciento de posibilidades de derrames es seudociencia, y solo demuestra el escaso nivel técnico científico y la irresponsabilidad de quienes difunden este tipo de información”, recalcaron, y ejemplificaron asegurando que los países más proteccionistas del mundo (Canadá, Australia, Holanda, Noruega, etc.) tienen actividad offshore por los beneficios que reporta. Y no prohíben, regulan.
Finalmente, aseguraron que los beneficios de la actividad impactarán positivamente y de lleno en la economía del país y, en especial, de una ciudad como Mar del Plata. De producirse un hallazgo, incontables actividades entre bienes y servicios se pondrán en marcha. “Ejemplos sobran a nivel mundial. Pero, a modo de muestra, para el estado de Río de Janeiro, en Brasil, la extracción de hidrocarburos en el mar representa un mayor ingreso en el producto bruto que el turismo”, sostuvieron.
“Los permisos para explorar el Mar Argentino son una muy buena noticia”, concluyeron desde el IAPG, y desde calle 6 abonan a esta teoría, que bien podría poner a la Provincia en la mesa de los grandes a la hora de hablar de petróleo y así obtener los beneficios que le ofrece su extracción y la posibilidad de ser parte de Vaca Muerta, un objetivo que Kicillof tiene desde su asunción como gobernador.