Préstamos

Milei mantuvo una reunión con el presidente del BID en Miami

El presidente argentino y el titular del Banco Interamericano de Desarrollo Ilan Goldfajn hablaron sobre los posibles créditos que podría conceder el organismo al país.

El presidente Javier Milei y el embajador argentino en Estados Unidos, Gerardo Werthein, se reunieron hoy con el titular del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn, y los gerentes del organismo, Matias Bendersky y James Scriven.

Ilan Goldfajn llegó pasadas las 9AM (las 10 en la Argentina) y subió a un ascensor del hotel Gran Beach Surfice Oceanfront para formalizar su encuentro con el presidente argentino. También Gerardo Werthein, embajador designado en los Estados Unidos, participó del cónclave.

Luego del encuentro, Goldfjan señaló que la institución que dirige sigue “muy comprometida con el desarrollo de la Argentina”. "Hoy hablamos sobre nuestro apoyo técnico para mejorar la eficiencia del gasto y la protección de las personas más vulnerables", indicó Goldfajn en la red social X.

El BID es un banco regional que se adecua a la agenda de intereses geopolíticos de la Casa Blanca, y por eso se ha transformado en una pieza clave para balancear las inversiones chinas en América Latina.

En este contexto, y asumiendo que Milei considera a Estados Unidos su socio estratégico, la reunión con Goldfajn debería servir para abrir un puñado de alternativas destinadas a fortalecer el programa económico del gobierno.

El presidente y su ministro de Economía, Luis Caputo, asumen que necesitan una mayor cantidad de reservas del Banco Central para unificar los tipos de cambio y contener un eventual conflicto con Beijing por el swap con China. Y el BID, durante la administración de Alberto Fernández, exhibió sus reflejos políticos para estar en la primera línea de fuego.

Milei calculó que necesita 15.000 millones de dólares para unificar los mercados y frenar un eventual ataque especulativo, y el BID junto al Fondo Monetario Internacional (FMI), la CAF y el Banco Mundial (BM) aparecen en su hoja de ruta como sus principales aportantes institucionales. Se trata de un trabajo silencioso y complejo que siempre necesitará del apoyo político de la Casa Blanca. El cónclave que Milei ahora protagoniza con Goldfajn apunta hacia esa dirección.