Revés legislativo
Se cayó la sesión en Diputados por falta de apoyo y la ley ómnibus deberá volver a comisiones
Tras días de debate y luego de la aprobación “en general” el pasado viernes, la discusión vuelve a foja cero.
Luego que el viernes pasado se entrara a un cuarto intermedio, este martes continuaba la maratónica sesión que buscaba aprobar la Ley de “Bases” que impulsaba el oficialismo de Javier Milei. Tras haberse aprobado en general, la ley en esa jornada, hoy se continuaba con el tratamiento y votación articulo por artículo.
Luego que varios de los incisos más importantes para el oficialismo hayan sido revocados por mayoría parlamentaria, finalmente el jefe de bloque de LLA, Oscar Zago, formuló una moción para devolver el proyecto a Comisiones. Acto seguido, el presidente de la cámara, Martín Menem, levantó la sesión.
Las diferencias entre el oficialismo y los llamados bloques dialoguistas se hicieron notorias ante los rechazos por parte de la mayoría, los cuales se vieron en los puntos dedicados a las facultades delegadas, deuda externa, Fondo de Garantía de Sustentabilidad y privatizaciones de empresas públicas.
De esta manera, y tras aprobarse las emergencias y las facultades delegadas a Javier Milei, la Cámara de Diputados volvió a enviar a comisión el dictamen de mayoría de la ley Bases y se levantó la sesión.
La decisión se tomó luego que el diputado Pichetto pidiera una pausa para llevar a cabo una reunión de jefes de Bloque a la que no dejaron entrar al de Unión por la Patria, Germán Martínez.
Con esta resolución, el proyecto de 646 artículos se deberá empezar a tratar de nuevo, ya que cayó la aprobación en general del proyecto así como los artículos aprobados y la orden del día número 1, de acuerdo con el artículo 155 del Reglamento de la Cámara baja.
De esta manera, el proyecto vuelve todo a cero, como si no se hubiera discutido nada desde el 27 de diciembre, cuando la iniciativa ingresó formalmente por mesa de entradas. Se trata de un rotundo fracaso para el oficialismo.
Cabe destacar que la ley ómnibus, le otorgaba superpoderes a Javier Milei en distintas materias para tomar decisiones sin pasar por el Congreso ni por los canales administrativos habituales y, además, permitía las privatizaciones de casi 30 empresas del Estado, uno de los caballitos de batalla de Milei.