SENTENCIA
Condenaron a una abogada y policía por impedirle a su expareja ver a su hijo
El padre del menor es un piloto argentino bicampeón de karting. La mujer influyó en la conducta del nene para que este creyera que su padre “no hace nada bien”.
En un fallo que sienta un precedente, el titular del Juzgado Correccional n°2 de La Plata, a cargo de Eduardo Eskenazi, condenó a nueve meses de prisión en suspenso a la abogada Angelina M.R. (31) por haber impedido el contacto de su hijo menor de edad con su padre biológico, el bicampeón de karting N.R.C, durante seis años.
Con la prueba testimonial producida durante la audiencia de debate, se acreditó que “cuanto menos desde principios del año 2016, la acusada impidió y obstruyó ilegalmente, de manera continua y sistemática -con aislados intervalos-, el contacto de su hijo menor de 10 años, conviviente, con su padre biológico, N.R.C”.
De acuerdo con el relato del padre del niño, los conflictos con su pareja comenzaron cuando el nene nació, por lo que siete meses más tarde se separaron. Entonces, ambos firmaron un acuerdo para visitar a la criatura que, pese a que fue homologado judicialmente, nunca fue cumplido por la progenitora.
Para el magistrado, al menos desde el año 2016 la mujer impidió que su exmarido pudiera ver a su hijo, a quien solo pudo visitar en diez oportunidades. Según el denunciante, el régimen de visitas convenido establecía que él retiraría a su hijo del domicilio materno los martes, viernes y sábados.
Varias denuncias
Asimismo, el piloto contó que en 2020 la mujer llevó al hijo de ambos a vivir a la casa de sus abuelos maternos, radicados en Miramar, sin haber existido un acuerdo previo entre ambos. Por ello, realizó varias denuncias penales, así como también presentaciones en distintos Juzgado de Paz a lo largo de los años, pero sin lograr que su exmujer cumpliera con el régimen de visitas acordado judicialmente.
Entonces, el perjudicado decidió recurrir al apoyo de los medios de comunicación, donde el denunciante expuso su desesperante situación frente al hecho de no poder ver a su hijo. Además de ser abogada, su expareja también se desempeña en la Policía de Seguridad Aeroportuaria.
Representado por los abogados Nicolasa Bocaratto y Martín de Vargas, mencionó que fue acompañado por personal policial a la vivienda donde la acusada convivía con su hijo, como así también en otras oportunidades lo hizo con una trabajadora social del Juzgado e incluso con la propia jueza.
En palabras de la pericia que la psicóloga Mariana Mendoza le realizó al chico, este “se obsesiona por desaprobar y criticar a uno de sus progenitores, con más frecuencia al padre en caso de que conviva con la madre. Cree que este (su papá) no hace nada bien”. El análisis de la profesional concluye que el menor tiene una “distorsión de la realidad”.