City Bell

Los vecinos no toleran más la inseguridad: piensan armarse y electrificar cercos

Frentistas del barrio La Emilia de City Bell ya no saben qué hacer. “La Policía tardó 25 minutos en venir y ni rastrilló la zona”, dijo una víctima. Otros se armaron con picanas.

La situación en La Plata en cuanto a la inseguridad ya no da para más. Los robos se multiplican a diario, siendo cada vez más violentos, y los vecinos sienten que ya agotaron todos los medios posibles para ser escuchados por las autoridades policiales. “Siguen haciendo oídos sordos a nuestros reclamos”, denunciaron.

Los atracos ya no distinguen franja horaria, barrios ni víctimas. Se producen todo tipo de ilícitos de día, de noche y de madrugada, desde barrio Aeropuerto hasta Villa Elisa, y los sufren jubilados, ancianos, trabajadores, madres y hasta niños. La situación, como nunca antes en la región, se volvió ingobernable y ante eso los frentistas empezaron a pensar seriamente en la posibilidad de armarse para enfrentar ellos mismos a los hampones, ante la inacción de los encargados de la fuerza.

De esta manera, luego de una sucesión de episodios delictivos en un sector del barrio La Emilia de City Bell, un hombre dijo que va a comprarse un arma de fuego para combatir a los ladrones. Entonces contó lo ocurrido durante la madrugada del lunes, cerca de las 4: “Quisieron entrar en casa los muchachos de lo ajeno. Por suerte se activó el perimetral y huyeron. Aún así no es grato pasar por la situación”. Como si fuese poco, aseguró: “Los implicados son vecinos, ya que las cámaras los registraron caminando desde más de una cuadra”.

Se mostró también indignado por el accionar de los encargados de la seguridad. “Esto se está volviendo constante, ya es la quinta vez. La Policía tardó 25 minutos en llegar, a diferencia de otros años que tardaban dos minutos, y ni siquiera rastrillaron la zona”, aseveró.

Medidas extremas

Tras comentar que tenía intenciones de armarse, varios vecinos se mostraron en contra de la decisión, argumentado que tiene más por perder que por ganar y que puede poner en riesgo tanto su vida como la de su familia. “Los delincuentes están dispuestos a todo, van a matar o morir y no les importa si uno está armado”, dijo uno.

Sin embargo, otros fueron por su mismo camino y si bien tampoco poseen pistolas en sus domicilios, sí tomaron resoluciones similares. “Qué mal momento tuviste que pasar. Yo en casa no tengo arma. Lo que sí tengo es una picana, que es legal y hasta la podés llevar en la cartera. A mí también me salvaron la alarma vecinal y los perros”, comentó una frentista. Otra dijo: “Yo tengo un perro afuera y dos medianos adentro. Lo peor es que (los cacos) son vecinos. Le pregunté a un policía si podía poner un cable con electricidad en el paredón y me respondió que no y que podía ir presa. Me enseñó entonces a hacer uno con un palo de escoba, hasta que pude comprarme la picana”.

Uno más se mostró de acuerdo en electrificar su cerca, mientras que otro vecino de La Emilia reconoció a los delincuentes que intentaron ingresar al mencionado inmueble y relató: “Son los mismos que me robaron el 24 (de mayo) a la misma hora”.

Por último, un lugareño manifestó: “Hoy día es tierra de nadie en seguridad, estamos en un barco a la deriva y hasta un niño pequeño se da cuenta”.