Récord delictivo: un menor de 16 años ya fue detenido 30 veces

Un ladrón menor de edad es el dueño de un lamentable récord en nuestra ciudad y cuenta con un frondoso prontuario, ya que lo detuvieron decenas de veces por distintos episodios de inseguridad. Perpetró junto a un cómplice su último robo en un comercio de la localidad de Villa Elvira, donde amenazaron a la empleada y huyeron con dinero en efectivo perteneciente a la recaudación de la jornada.

De acuerdo a la información a la que accedió este multimedio, el adolescente tiene 16 años y fue capturado por los efectivos en al menos 30 oportunidades en tan solo 21 meses. Pero, valiéndose de su condición, en la mayor parte de esas aprehensiones fue liberado pocas horas después. Sin sentir el rigor del castigo volvió a delinquir en varias ocasiones en más.

Uno de esos tantos hechos los cometió días atrás. Junto a un hombre de 30 años se dirigieron hasta una panadería ubicada en la zona de las calles 120 y 75. Una vez que entraron al local, atacaron a golpes a una joven de 23 años que estaba atendiendo en ese momento y la intimidaron para que les entregara todos los billetes que estaban en la caja registradora.

Sin negarse al pedido de los malvivientes, la víctima les dio el dinero en efectivo y ambos escaparon con el botín entre sus manos. Con los sospechosos en plena fuga, llamaron al

servicio de emergencias 911 para denunciar lo ocurrido y a los pocos minutos se hicieron presentes los efectivos del Comando de Patrullas para montar un operativo cerrojo en las inmediaciones.

Finalmente los encontraron a escasas cuadras y allí descubrieron que uno de los maleantes era el adolescente que tenía 30 ingresos a la comisaría en menos de dos años. Les incautaron una suma cercana a los $2.500 y por este nuevo caso, lo dejaron ir a las horas, pero quedó imputado por “robo” en la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil N° 1 y su cómplice enfrenta cargos por “robo agravado por la participación de un menor” en la UFI N° 16.

Por otro lado, en la localidad platense de Melchor Romero, se produjo una particular situación en la que un grupo de vecinos estaban reunidos para coordinar los reclamos en materia de inseguridad, cuando insólitamente fueron testigos de un intento de robo en el barrio, por lo que decidieron actuar por sus propios medios.

Todo sucedió en las calles 161 y 32, donde dos sujetos pretendían llevarse una motocicleta Keller 110, amenazando a la víctima con un arma blanca. Ante esta situación, los frentistas intercedieron y al verse acorralados los malvivientes emprendieron la fuga, pero uno de ellos fue alcanzando a los pocos metros y fue reducido.

Su cómplice logró escapar, y los vecinos retuvieron al ladrón durante algunos minutos en los que lo golpearon para que no pueda huir. Tras la llegada de los efectivos policiales, el hampón fue arrestado y luego trasladado hasta la comisaría Decimocuarta, donde tras la intervención de la UFI en turno quedó imputado por “robo en grado de tentativa”.