Asesinato
Recuperó la libertad el detenido por el crimen de Berisso
En un giro inesperado para la causa, el hasta el momento único sospechoso del homicidio fue liberado por las autoridades. Los investigadores, mientras tanto, continúan buscando pistas.
A William Ortigoza (41) lo mataron de un tiro en el estómago en la ciudad de Berisso. Momentos antes, lo habían acusado de un intento de abuso, algo que todavía está investigando la Policía. Sin embargo, en las últimas horas la causa dio un giro dramático cuando liberaron al único sospechoso de su homicidio.
“No había elementos suficientes para confirmar fehacientemente que el acusado fue el que efectuó el disparo que acabó con la vida de la víctima”, detallaron fuentes policiales y judiciales a este multimedio. “Es por esto que recuperó la libertad esta mañana”, agregó.
De todas formas, los investigadores no descartaron por completo al sospechoso y aseguran que esto no significa que esté completamente desligado de la causa, aunque deberán seguir indagando para obtener nuevas pruebas o testimonios.
El análisis de las cámaras de seguridad de las inmediaciones será clave para poder establecer fehacientemente qué fue lo que sucedió y cómo fueron los minutos previos que derivaron en el homicidio de Ortigoza.
Sangriento crimen
De acuerdo a la información recabada por diario Hoy, todo sucedió en la vía pública, en la zona de las calles 148 Norte entre 15 y 16, donde se produjo la riña entre los implicados. En ese marco, los uniformados recibieron una alerta radial mediante el 911, que indicaba la presencia de una persona que se encontraba con lesiones graves tras recibir un tiro en el pecho.
Al arribar, tanto los efectivos policiales como el personal del SAME que se hizo presente en el lugar se toparon con el sujeto tendido en el suelo, con una herida a la altura del abdomen y sin signos vitales. Por tal motivo le realizaron las maniobras de resucitación correspondiente mientras era trasladado hasta el hospital local, pero no pudieron reanimarlo y solo les quedó confirmar el deceso.
Al entrevistarse con algunos de los frentistas del barrio, los investigadores descubrieron que el hombre había sido sindicado por dos mujeres que lo habían denunciado por intento de abuso. Pronto apareció en escena la pareja del fallecido y contó su versión de los hechos, diciendo que su esposo discutió con un individuo y este último le disparó.
Con las tareas realizadas, los detectives de la DDI lograron identificar al presunto tirador, un masculino de 31 años, y lo detuvieron a las pocas cuadras. El implicado todavía llevaba puesto un mameluco de obrero que, aparentemente, tenía cuando apretó el gatillo. No obstante, finalmente ayer recuperó la libertad.